Comparecencia ante la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Vasco para presentar el proyecto de la Secretaria General de Paz y Convivencia de la Presidencia del Gobierno Vasco
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Comparecencia Jonan Fernandez - Secretaría Paz y Convivencia
1. Comparecencia ante la Comisión de Derechos
Humanos del Parlamento Vasco para presentar
el proyecto de la Secretaria General de Paz y
Convivencia de la Presidencia del Gobierno Vasco
6 de marzo de 2013
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2. 1. El factor humano como premisa
En el entorno europeo, la estructura de las políticas gubernamentales cuenta
habitualmente con una dirección, instituto o instancia similar de derechos humanos
dedicada a su defensa y promoción. En contextos de normalidad, este instrumento es
suficiente para articular las políticas públicas de compromiso con el civismo y las
libertades y derechos fundamentales.
Nuestro contexto actual es, sin embargo, singular. Hace 17 meses, ETA
anunció el cese definitivo de su actividad violenta, después de más de cinco décadas.
Todas las personas por debajo de 50 años hemos vivido toda nuestra vida con ello.
Estamos ante un acontecimiento verdaderamente histórico. La creación de una
Secretaría General de Paz y Convivencia es una decisión directamente relacionada
con este contexto sociopolítico excepcional.
Es una respuesta adaptada a una coyuntura especial. Dos grandes puntos
definen su misión específica: primero, contribuir a consolidar de modo definitivo e
irreversible la paz; y segundo, promover y colaborar en la mejora una convivencia
social y política, dañada por una vivencia traumática y sostenida de terrorismo,
violencia y vulneraciones de derechos humanos.
Muy probablemente, esta doble misión específica no tenga sentido en nuestras
políticas públicas dentro de algunos años porque los retos entonces sean ya otros.
Aunque, no obstante, es también probable que si ahora no hacemos este esfuerzo, tal
vez, dentro de algún tiempo lo echemos en falta.
Quienes en este momento ostentamos cualquier responsabilidad
parlamentaria, gubernamental o social tenemos la ocasión de poder enfrentar este
doble reto de la paz y la convivencia. En este contexto, lo que está en juego no es solo
uno u otro modelo, una u otra visión ideológica de esta etapa post-violencia. Lo que
está en juego tiene que ver, en primera instancia, con el sufrimiento humano.
Muchas personas han padecido mucho y siguen todavía haciéndolo. Lo que
hagamos o dejemos de hacer puede contribuir a paliar, reducir o superar los
sufrimientos de personas con rostro humano. Nuestra acción política concertada
puede contribuir a una vida mejor y a un sufrimiento menor de personas concretas.
Esta es, desde mi punto de vista, la referencia de valor superior en este momento.
Se trata del factor humano, un factor que en este momento no debiéramos
perder de vista. Podemos dedicarnos a ello. Tenemos la oportunidad de desarrollar un
trabajo que muestre el lado más noble de la política. Esta es la visión que esta
Secretaría General quiere subrayar como presupuesto.
2. Diagnóstico de situación
Sobre esta premisa, el diagnóstico de situación viene enmarcado por tres
principios de realidad y tres principios de responsabilidad. Este análisis fundamenta el
proyecto de actuación que le sigue.
2.1. Principios de realidad
Un punto de partida claro, una base sólida y una prioridad destacada. Estos
son los tres principios de realidad en que se asienta el proyecto que esta Secretaría
General de Paz y Convivencia quiere compartir e impulsar.
I. Un punto de partida: la realidad ha cambiado y no tiene vuelta atrás viable
La realidad ha cambiado, y ha cambiado a mejor. Tiene además por delante un
amplio margen de mejora. Se trata de un hecho con poder normativo. Nuestra
sociedad vive ya de acuerdo a este nuevo contexto. Precisamente por esta
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3. determinación social, entre otras cosas, podemos afirmar con solvencia que este
cambio es irreversible porque no tiene una vuelta atrás viable ni sostenible.
Entender la profundidad de este principio de realidad es determinante para
situarnos en el punto de partida de esta nueva etapa. Es importante subrayar esta
evidencia porque todos arrastramos inercias y tics que nos devuelven una y otra
vez a los bucles del pasado. Sin embargo, nuestra sociedad actual se parece más a
la sociedad vasca de 2023 que a la de 2003.
II. Una base: tenemos una sociedad adulta con unas cuantas ideas claras
Esta situación tiene riesgos, lógicamente, pero no todos nuestros temores
están justificados. No podemos enfocar las políticas públicas de paz y convivencia
como si nuestra sociedad fuese menor de edad en materia de principios éticos,
cívicos o democráticos. Hay mucho trabajo hecho gracias al esfuerzo de todos. La
madurez ética, cívica o democrática de la ciudadanía, en ocasiones, se sitúa
incluso en vanguardia.
El uso de la violencia, el terrorismo o el recurso a cualquier vulneración de
derechos humanos están social y políticamente desautorizados de modo
inapelable. Nuestra sociedad es mayor de edad. Sobre esta base, nuestra tarea
primordial es acordar decisiones prácticas, concretas y objetivas que sean útiles
para reparar los daños del pasado, mejorar el presente y preparar el futuro.
III. Una prioridad: es ahora cuando conviene invertir en convivencia
Al mismo tiempo, hemos de reconocer que hemos vivido una historia de
violencia social y políticamente traumática que, según la circunstancia biográfica en
la que nos hayamos encontrado, nos condiciona de modos diferentes. La
experiencia de otros contextos post-violencia nos ha enseñado algo. Una mala
asimilación de este tipo de vivencias en el cuerpo social puede dar lugar, 15 o 20
años más tarde, a la aparición de efectos reactivos normalmente minoritarios, pero
imprevisibles e indeseables.
Conviene invertir en convivencia ahora. ¿Qué significa esto en la práctica?
Quiere decir que es fundamental compartir social y políticamente unas pocas
bases. Debemos identificar, definir y proyectar los consensos básicos para poder
discrepar en todo lo demás con garantías. Significa crear un espacio de confianza
social y política elemental. Esta es una de las grandes prioridades que tenemos por
delante a lo largo de estos cuatro años.
2.2. Principios de responsabilidad
La definición de estos tres principios de realidad nos permite configurar el
marco de actuación en torno a tres principios de responsabilidad. Responden al qué
debemos hacer en relación con el pasado, el presente y el futuro.
I. Pasado. Tenemos un deber de clarificación
No podemos construir el futuro como si nada hubiera ocurrido en el pasado. Lo
padecido es demasiado grave. Debemos poner luz sobre la violencia y sobre cada
vulneración de derechos humanos para poder hacer efectivos los principios de
verdad, justicia y reparación. En este proceso de clarificación es nuestro deber ético
respetar dos criterios: no excluir y no equiparar. Es un deber de memoria y
reconocimiento a las víctimas, y de cumplimiento de las leyes y acuerdos
parlamentarios.
Debemos visibilizar los hechos objetivos que representaron vulneración de
derechos humanos, sin excluir ni olvidar ninguno de ellos. Al mismo tiempo,
debemos respetar la diferencias de contexto victimológico y criminológico, sin
3
4. mezclar, equiparar, compensar, comparar o atenuar la gravedad intrínseca de cada
vulneración con otra de otro signo.
II. Presente. Tenemos un deber de normalización
Nuestro presente está condicionado por las consecuencias del pasado. La
violencia y las violaciones de derechos humanos tienen un efecto deshumanizador.
Sacan lo peor de la condición humana y llegan incluso a hacer desear lo peor. Las
diversas experiencias internacionales sobre los procesos post-violencia subrayan la
importancia de adoptar estrategias, compromisos, proyectos, discursos y acciones
que se orienten a la normalización social del presente.
Promoverla es dar pasos para lograr la desaparición total de la violencia, para
reorientar las inercias y consecuencias heredadas de la etapa anterior, y para
consolidar definitivamente la convivencia. Normalización social significa también dar
pasos para crear un espacio en el que, a pesar de lo ocurrido, todas las tradiciones
políticas tengan su sitio. Se trata de una tarea que debe ser compartida y
consensuada.
III. Futuro. Tenemos un deber de conciliación
El sentido último de un sistema democrático se ordena al logro de una
convivencia justa e integradora. Este es el valor superior, el fin último de toda
acción política en democracia. Cuando por cualquier circunstancia ese equilibrio
convivencial se ha perdido la política se orienta a recuperarlo hasta donde sea
posible y razonable.
Tan importante como realizar una revisión crítica del pasado y como tomar las
decisiones necesarias para normalizar el presente, es poner las bases para
encauzar una convivencia democrática y conciliada en el futuro. Se trata de buscar
e impulsar las estrategias educativas, divulgativas o comunicativas que permitan
configurar una cohesión de base en torno a la dignidad humana y los derechos
humanos.
3. Las bases del proyecto para estos cuatro años
La intención de esta Secretaría General es presentar, antes de este verano, un
Plan de Paz y Convivencia para esa legislatura. Este plan es un proyecto cuyas bases
se pueden resumir en cinco apartados: (1) denominación y misión, (2) objetivos, (3)
estrategia, (4) ejes y programas de actuación y (5) retos estratégicos.
3.1. Denominación y misión
Necesitamos buscar y encontrar una palabra que nos una en esta tarea que
tenemos por delante ahora mismo. No es fácil. Internacionalmente se utiliza con
normalidad el concepto reconciliación. Sin embargo, aquí, es un término que da
problemas, no es suficientemente pacífico. Tratando de buscar espacios de
acuerdo, me permito tomar prestada una voz que tal vez pueda ayudarnos.
El pasado 21 de febrero, Osvaldo Puccio, presidente de la Fundación Salvador
Allende y ponente invitado en el acto en memoria de Fernando Buesa y Jorge Díez,
habló de un concepto que a él le ha sido útil en su experiencia y que describe bien
la finalidad última de la tarea que necesitamos enfrentar.
Según su exposición, todos los objetivos de paz, revisión crítica del pasado,
convivencia, reconciliación… pueden quedar englobados dentro de la palabra
reencuentro o encuentro. “Plan de paz y convivencia 2013-16, un proyecto de
encuentro social”. Esta es la propuesta de denominación de esta iniciativa.
El concepto de encuentro explica y refleja perfectamente el espíritu que lo
impulsa. Describe su misión: construir una sociedad compartida. Pensemos en los
4
5. próximos ocho o diez años. Nuestro principal cometido es crear condiciones para
que en este país exista una plaza pública en que quepamos todos. Un espacio de
encuentro democrático en el que el respeto y la discrepancia convivan con
normalidad.
3.2. Objetivos
El reencuentro en sociedad es la misión de este proyecto. Tenemos por
delante cuatro años para avanzar en esa dirección. Esbozo siete objetivos expresos
y evaluables que quisiéramos ver cumplidos en 2016. Son la tracción del plan de
actuación del Gobierno Vasco en esta legislatura.
I. Contribuir al desarme y final efectivo de ETA.
II. Realizar una constatación de todas las vulneraciones de derechos humanos.
III. Completar el proceso de reconocimiento y reparación a todas las víctimas.
IV. Definir e impulsar una política pública de memoria.
V. Promover acuerdos para una política penitenciaria acorde al nuevo contexto.
VI. Alcanzar consensos básicos para un escenario de encuentro sociopolítico.
VII. Buscar interacciones socioeducativas para un cultura de encuentro social.
3.3. Estrategia
Para alcanzar estos objetivos, la estrategia que vamos a desarrollar se asienta
en unos principios éticos y democráticos, un criterio rector, una metodología y una
serie de criterios de actuación general
I. Principios éticos y democráticos
Este proyecto de encuentro social se fundamenta en la dignidad humana como
valor supremo y en la defensa y promoción de los derechos humanos. De este
principio ético se deriva el compromiso inequívoco con la democracia, la libertad y
el pluralismo, así como con la oposición a cualquier forma de violencia o medio de
imposición antidemocrática.
II. Criterio rector: Consenso y estándares internacionales
Desde todo punto de vista, por convicción y por necesidad, en esta materia de
la convivencia es fundamental actuar en base a la búsqueda de los más amplios
consensos. Esta será siempre la primera opción de esta Secretaría General: buscar
el acuerdo transversal a la pluralidad de nuestra realidad sociopolítica.
Cuando el acuerdo no sea posible y especialmente cuando la necesidad de
tomar decisiones sea imperativa, esta Secretaría General adoptará las decisiones
que mejor respondan a las directrices de las Naciones Unidas y los estándares
internacionales en materia de derechos humanos y procesos de paz y
reconciliación.
III. Metodología: micro-acuerdos
Alcanzar consensos es fundamental; pero debemos reconocer que no es tarea
fácil. Esta Secretaría General va a impulsar una metodología de trabajo y
colaboración con los grupos parlamentarios de esta cámara basada en la búsqueda
de micro-acuerdos. Se trata de trazar un camino realista, transitable y finalmente
efectivo.
La propuesta de micro-acuerdos es un método de trabajo con una vocación
acumulativa y progresiva que permita construir mediante pequeños fragmentos de
acuerdo una perspectiva final de consenso básico, sólido y consistente. Un buen
ejemplo de micro-acuerdo fue el alcanzado el pasado 22 de febrero en esta misma
5
6. cámara para realizar una ofrenda floral conjunta en memoria de Fernando Buesa y
Jorge Díez.
IV. Criterios de actuación general: las reglas del juego
El plan de trabajo de la Secretaría General de Paz y Convivencia está guiado
por cuatro pautas de actuación general. Constituyen las reglas de juego que
deseamos explicitar y compartir en la medida de lo posible.
·Toda la actuación en materia de paz y convivencia se estructurará en tres
tiempos: pasado, presente y futuro. Los programas y acciones se ordenarán del
siguiente modo: uno, respuestas ante lo sucedido en el pasado; dos, prioridades
derivadas de las necesidades del presente; y tres, las tareas fundamentales para
el futuro.
·La Secretaría General de Paz y Convivencia buscará espacios de colaboración
con todas las instituciones y entidades concernidas en esta materia y de modo
principal y preferente con el Parlamento Vasco, con su Presidencia y con la
Ponencia de paz y Convivencia.
·El pronunciamiento público y el debate puramente mediático juega un papel
indiscutible en el ámbito de la política y las instituciones. A pesar de ello, la
voluntad de esta Secretaría General es no disputar esa batalla en los términos
clásicos y, en todo caso, subordinarla al trabajo de elaboración discreta y al
objetivo mayor del consenso.
·Es también criterio de actuación de este proyecto no mezclar, en ningún caso, el
debate político sobre el marco jurídico-político y el debate pre-político sobre el
marco de encuentro cívico-social. Este segundo tiene una naturaleza
fundamentalmente ética y debe unirnos más allá de las opciones políticas
partidarias.
3.4. Ejes y programas de actuación
Como se ha dicho ya, el plan de trabajo se estructura en tres ejes: pasado,
presente y futuro. Cada uno de estos ejes contiene cuatro programas de actuación.
Dentro de estos programas, se insertan líneas de acción que se explicarán con más
detalle en el punto siguiente:
·Eje I. Pasado
·Programa 1. Constatación de vulneraciones de derechos humanos.
·Programa 2. Política pública de memoria.
·Prgrama 3. Continuación de los procesos de reconocimiento y reparación a las
víctimas del terrorismo.
·Programa 4. Extensión del reconocimiento y reparación a todas las víctimas de
vulneraciones de derechos humanos.
·Eje II. Presente
·Programa 5. Colaboración con el Parlamento Vasco.
·Programa 6. Líneas de trabajo conjunto con otras instituciones.
·Programa 7. Marco de relación con el Alto Comisionado de Naciones Unidas.
·Programa 8. Sensibilización social.
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7. ·Eje III. Futuro
·Programa 9. Líneas de trabajo inter-departamental.
·Programa 10. Colaboración con instituciones locales y centros educativos.
·Programa 11. Participación ciudadana y coordinación con agentes sociales.
·Programa 12. Cooperación con las instituciones europeas.
3.5. Micro-acuerdos que constituyen retos estratégicos
Anteriormente, he mencionado la metodología de los micro-acuerdos como
elemento clave de la estrategia a desarrollar en los próximos meses y años. La
concreción de esta metodología se plasma en tres categorías de objetivos:
I. Micro-acuerdos para una conclusión compartida sobre el pasado.
II. Micro-acuerdos de normalización para nuestra realidad presente.
III. Micro-acuerdos de bases éticas y pre-políticas para un futuro de encuentro.
4. Avance de las principales líneas de acción
El contenido de esta comparecencia puede considerarse como un anteproyecto
del Plan de Paz y Convivencia 2013-16, cuyo primer borrador presentaremos dentro
de los próximos tres meses. Aunque su estructura todavía pueda sufrir alguna
variación, orientativamente, podemos anticipar que las siguientes serán sus
principales líneas de actuación. Expongo, a continuación, las directrices básicas en
cada una de ellas.
·Eje I. Pasado
·Programa I. Constatación de vulneraciones de derechos humanos
-Acción 1. Elaboración de un informe independiente de constatación de
vulneraciones de derechos humanos
La revisión crítica del pasado necesita una aproximación objetiva a lo sucedido.
En la actualidad no contamos con una base de datos de referencia que integre
todas las vulneraciones de derechos humanos ocurridas en nuestro país en los
últimos 50 años. Es voluntad de este Gobierno dotarse de esa herramienta. La
redacción de este documento se encargará a un grupo de personas
independientes, de sensibilidades diversas y con prestigio y conocimiento en
esta materia.
No se trata de un informe de investigación o peritaje de casos, ni tampoco de
realizar un listado. El contenido del encargo se orientará a elaborar un
documento breve y descriptivo que compile y recopile los datos de distintas
fuentes e informes de modo que podamos delimitar y dimensionar un mapa de
las vulneraciones de derechos humanos y del sufrimiento. Por ello, tampoco se
trata de un informe de interpretación o valoración, sino de un informe de
constatación de datos objetivables y, en su caso, de observaciones y
recomendaciones finales.
-Acción 2. Divulgación del informe
El objetivo es que este informe esté redactado antes de finalizar este curso
parlamentario. Una vez elaborado, esta Secretaría General lo presentará a la
Ponencia de Paz y Convivencia de este Parlamento y lo ofrecerá como
herramienta de trabajo. A partir de ese momento, el informe será distribuido a
todas aquellas entidades e instituciones concernidas en la promoción de la
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8. memoria, la solidaridad con las víctimas, la defensa de los derechos humanos, o
la educación para la paz y la convivencia.
·Programa II. Política pública de memoria
-Acción 3. Elaboración del proyecto del Instituto de la Memoria
La voluntad de esta Secretaría General de Paz y Convivencia es que el
proyecto del Instituto de la Memoria se base en un primer micro-acuerdo sobre
políticas públicas de memoria. A lo largo de estos próximos tres meses, es
intención del Gobierno presentar, en primer lugar, esa propuesta de acuerdo
básico, y a continuación, el proyecto del Instituto de la Memoria sobre la base de
la proposición consensuada en la legislatura anterior.
-Acción 4. Constitución y creación del Instituto de la Memoria
La fase de diseño, consenso, aprobación y proyección del Instituto de la
Memoria va a requerir un proceso de alrededor de seis meses. Esto significa que
el proceso de constitución y creación del Instituto se iniciará en el último
trimestre de este año y se prolongará a lo largo del siguiente.
·Programa III. Continuación de los procesos de reconocimiento y reparación a
las víctimas del terrorismo
-Acción 5. Desarrollo de las líneas de reconocimiento, ayuda y reparación a
las víctimas del terrorismo
Este Gobierno va a dar continuidad a las líneas de actuación establecidas,
desde anteriores legislaturas, por la Dirección de Atención a las Víctimas del
Terrorismo. Esta voluntad ha quedado reflejada en cada una de las partidas del
presupuesto 2013 relacionadas con esta materia.
Por otra parte, tanto la Directora de Víctimas y Derechos Humanos, Monika
Hernando, como el Coordinador de Atención a las Víctimas, Txema Urkijo,
mantienen y van a mantener abierta una línea de comunicación y colaboración
con todas las asociaciones de víctimas del terrorismo.
-Acción 6. Participación en el proyecto de Memorial de las víctimas del
terrorismo
La ley de Reconocimiento y Protección Integral de las Víctimas del Terrorismo
atribuye al Gobierno español la responsabilidad de creación de un Centro
Memorial de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco. Su preparación se
delegó en una Comisión Mixta de ambos gobiernos. Su última reunión se celebró
el pasado mes de mayo.
En este encuentro se pusieron de manifiesto algunos problemas de orden
práctico. Este Gobierno tiene la voluntad de colaborar en la resolución de los
mismos y en el diseño del proyecto en base a dos criterios: dimensionamiento
cabal y sostenible, e inserción de sus contenidos en principios universalizables
para una política pública de la memoria.
·Programa IV. Extensión del reconocimiento y reparación a todas las víctimas
de vulneraciones de derechos humanos
-Acción 7. Culminar el trabajo iniciado en la anterior legislatura con el
decreto de víctimas de sufrimientos injustos derivados de un contexto de
violencia de motivación política
La actual legislación no prevé el amparo a las víctimas de algunas de las
categorías de violaciones de derechos humanos ocurridas en nuestro contexto
en las últimas décadas. Con el objetivo de corregir este déficit, al final de la
anterior legislatura, el Gobierno Vasco aprobó el Decreto 107/2012, de
8
9. declaración y reparación de las víctimas de sufrimientos injustos como
consecuencia de la vulneración de sus derechos humanos, producida entre los
años 1960 y 1978 en el contexto de la violencia de motivación política vivida en
la Comunidad Autónoma del País Vasco.
Este decreto ha iniciado un camino que este gobierno tiene la voluntad de
continuar y completar. En este sentido, esta Secretaría General ha adoptado dos
decisiones. En primer lugar, proceder a una corrección técnica del decreto que,
en el momento de su ejecución, ha puesto de manifiesto algunos problemas
prácticos. La Dirección de Víctimas y Derechos Humanos está trabajando con el
objetivo de que, en la medida de lo posible, en las próximas semanas pueda
estar ya aprobada la nueva redacción. En segundo lugar, la Comisión de
Valoración ha reiniciado sus trabajos, habiendo celebrado una primera reunión
este lunes 4 de marzo para continuar analizando y tramitando las solicitudes
presentadas.
-Acción 8. Crear las herramientas necesarias para completar el
reconocimiento a todas las víctimas de vulneraciones de derechos
humanos.
El Pleno del Parlamento Vasco, en la sesión celebrada el 31 de marzo de
2011, aprobó la Proposición No de Ley 61/2011, sobre víctimas de violaciones
de derechos humanos y otros sufrimientos injustos producidos en un contexto de
violencia de motivación política. En esa Proposición No de Ley, el Parlamento
acordó que se dictaran uno o varios Decretos, el primero de ellos, ya
mencionado en el apartado anterior, fue promulgado en junio de 2012.
Sobre estas bases, este Gobierno tiene la determinación de continuar con la
labor de reconocimiento y reparación emprendida, ampliándola a todos los
supuestos de vulneración de derechos humanos ocurridas hasta nuestros días
en el contexto de la violencia de motivación política vivida en Euskadi. Este fue,
por otra parte, el encargo que la anterior Consejera de Interior, Justicia y
Administraciones Públicas hizo mediante la Orden de 19 de octubre de 2012.
·Eje II. Presente
·Programa V. Colaboración con el Parlamento Vasco
-Acción 9. Contribución a la Ponencia de Paz y Convivencia
Esta Secretaría General se va a poner a disposición de la Ponencia de Paz y
Convivencia de este Parlamento para contribuir desde el Gobierno a trazar
itinerarios de consenso en todos aquellos ámbitos que sean relevantes para el
proyecto de un encuentro social.
Esta línea de trabajo tiene un carácter de prioridad dentro del plan de actuación
de esta Secretaría General. Este Parlamento es el foro plural en que están
representadas todas las sensibilidades políticas de nuestro país por decisión
libre de sus ciudadanos/as. Por este motivo, los procesos de diálogo y acuerdo
que se tejan en esta institución tienen un valor estratégico.
-Acción 10. Trabajo conjunto con la Presidencia y Mesa del Parlamento
Vasco
Del mismo modo y por los mismos motivos, la intención del Gobierno es
colaborar con la Presidencia y Mesa de esta cámara en el impulso de iniciativas
institucionales que coadyuven a los mismos objetivos en materia de paz y
convivencia y especialmente en el impulso de una metodología y un proceso de
micro-acuerdos progresivos y acumulativos.
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10. ·Programa VI. Líneas de trabajo con otras instituciones
-Acción 11. Diálogo con el Gobierno español
La voluntad del Gobierno es mantener canales fluidos de diálogo y trabajo
discreto para la búsqueda de soluciones conjuntas con el Gobierno español en
los diferentes niveles y temáticas que están relacionadas con los objetivos de
paz y convivencia. Dentro de todas ellas, tiene especial relevancia la política
penitenciaria. El Gobierno afronta esta cuestión en cuatro niveles:
·En primer lugar y como ya ha expresado el Lehendakari, el Gobierno Vasco
reclama la transferencia de la competencia de prisiones y el acercamiento de
presos.
·En segundo lugar, el Gobierno Vasco ofrece su disposición a promover un
acuerdo en materia de política penitenciaria adaptado a la realidad del nuevo
contexto social en que nos encontramos.
·En tercer lugar, el Gobierno Vasco considera que deben explorarse todas las
posibilidades que ofrece la ley en materia de reinserción, haciendo efectivas
las medidas correspondientes de beneficio penitenciario en cada caso y
haciendo posible la continuidad de procesos como los Talleres de
Convivencia y los Encuentros Restaurativos.
·En cuarto y último lugar, este Gobierno propone la adopción, a corto plazo,
de dos tipos de medidas. Tienen que ver con la búsqueda de soluciones
humanitarias para los presos enfermos y con la búsqueda de medidas de
sentido común para aquellos presos cuyas condenas están más relacionados
con actividades políticas, antes ilegalizadas, pero ahora desarrolladas ya de
un modo normalizado y legal.
-Acción 12. Colaboración con las universidades y otras instituciones
En el desarrollo de este plan de actuación, el Gobierno buscará crear líneas de
colaboración y asesoramiento con las universidades vascas, vinculadas a
proyectos concretos. El objetivo es que la investigación, el talento y el
conocimiento de la institución universitaria pueda encontrar un ámbito de
aplicación práctico en el marco de una prioridad tan importante como la paz y la
convivencia.
Del mismo modo, la vocación de esta Secretaría General es dialogar, escuchar
y, en la medida de lo posible, cooperar con todas aquellas asociaciones,
entidades o instituciones que estén relacionadas con el logro de los objetivos
definidos para este proyecto al servicio de la paz y el encuentro social.
·Programa VII. Marco de relación con el Alto Comisionado de las Naciones
Unidas
-Acción 13. Aplicación de los estándares internacionales
La relación con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas buscará, en primer
lugar, la referencia de los estándares del derecho internacional de los derechos
humanos en situaciones post-violencia, para su aplicación en el contexto de
nuestra propia realidad local. El objetivo es que esta referencia pueda servir de
base facilitadota del consenso en el proceso que tenemos por delante.
-Acción 14. Asesoramiento del Alto Comisionado para el Plan de Paz y
Convivencia
La colaboración con Naciones Unidas buscará, en segundo lugar, el
asesoramiento de su Alto Comisionado para los Derechos Humanos para
orientar los ejes y contenidos del Plan de Paz y Convivencia, sobre la base de su
“Manual sobre Planes de Acción de Derechos Humanos”.
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11. Precisamente, de este marco de referencia saldrán las directrices que se
expondrán en todas las acciones restantes relacionadas con la comunicación
social, la divulgación, la educación, la juventud, la implicación de las instituciones
locales y europeas o la participación ciudadana.
·Programa VIII. Sensibilización social
-Acción 15. Impulso de un proyecto de encuentro social
A lo largo de estos cuatro años, una de las líneas de acción de esta Secretaría
General se orientará a desarrollar, con la periodicidad que sea necesaria y
posible, iniciativas orientadas a la promoción social de los fundamentos de este
plan de paz y convivencia y de su misión principal: hacer posible un proceso de
encuentro social.
-Acción 16. Iniciativas de educación en derechos humanos
Dentro del mismo programa y de modo coordinado con la acción anterior, la
Dirección de Víctimas y Derechos Humanos desarrollará iniciativas específicas
de educación en derechos humanos, de modo particular coincidiendo con el
aniversario, cada 10 de diciembre, de la Declaración Universal de los Derechos
Humanos.
·Eje III. Futuro
·Programa IX. Líneas de trabajo interdepartamental
-Acción 17. Diseño de una política interdepartamental de paz y convivencia
El Plan de Paz y Convivencia del Gobierno contendrá un programa de
actuación interdepartamental cuyas principales actuaciones corresponderán a la
Dirección de Víctimas y Derechos Humanos, a la Dirección de Juventud, al
Departamento de Educación, Cultura y Deporte (EITB), al Departamento de
Seguridad y a la propia Lehendakaritza.
La elaboración de los contenidos de este plan interdepartamental se está
realizando ahora en base a una evaluación del trabajo desarrollado en las
anteriores legislaturas con los planes precedentes. Por otra parte, hemos
solicitado a los agentes y movimientos sociales vinculados a esta área sus
aportaciones a este proyecto. Una vez el primer borrador de este plan esté
finalizado, se presentará a esta cámara para recabar la opinión y sugerencias de
los grupos.
-Acción 18. Coordinación interdepartamental del Plan de Paz y Convivencia
A partir del momento en que el Plan esté aprobado se creará una Comisión
Interdepartamental que será coordinada por la Dirección de Víctimas y Derechos
Humanos. Esta comisión será la encargada de dinamizar, coordinar y evaluar el
desarrollo de las distintas líneas de actuación.
·Programa X. Colaboración con instituciones locales y centros educativos
-Acción 19. Cooperación con ayuntamientos y diputaciones
El Gobierno Vasco tiene la voluntad de crear un marco de cooperación con los
ayuntamientos y las diputaciones forales para promover un proceso de
encuentro social. En este momento, se están dando ya experiencias plurales en
algunos municipios que van en esa dirección. Se trata de iniciativas sencillas
pero muy interesantes porque agrupan a todas las sensibilidades políticas
locales e involucran a organizaciones sociales.
El criterio es extender esa línea de trabajo al mayor número de localidades
vascas. Los programas de subvenciones a Ayuntamientos se orientarán a este
11
12. objetivo. Del mismo modo, los recursos de otro tipo con que pueda contar esta
Secretaría General tratarán de contribuir en la medida de lo posible a promover
esta línea de actuación de carácter estratégico.
-Acción 20. Colaboración con los centros educativos
Junto a los Ayuntamientos, otro de los ámbitos estratégicos del Plan de Paz y
Convivencia serán los centros educativos con los que a través del Departamento
de Educación se buscará un amplio campo de colaboración. Varios serán los
ejes de desarrollo en que se plasme esta cooperación:
·En primer lugar, profundizar en las potencialidades del Acuerdo del Carlton
que en torno al principio de respeto a la dignidad humana y al compromiso
con los derechos humanos aglutinó a la comunidad educativa.
·En segundo lugar, intensificar los programas de formación del profesorado
en materia de derechos humanos, solidaridad con las víctimas, resolución
pacífica de conflictos y convivencia.
·En tercer lugar, dar continuidad a las experiencias educadoras mediante
testimonios de víctimas que podrán ser, según el criterio de cada centro,
educativo, tanto presenciales como escritos o audiovisuales.
·En cuarto y último lugar apoyar iniciativas educadoras con el alumnado
orientadas al aprendizaje de la convivencia mediante recursos creativos como
el cine, el teatro, la literatura, las nuevas tecnologías o los idiomas.
·Programa XI. Participación ciudadana y coordinación con agentes sociales
-Acción 21. Participación ciudadana
El Gobierno Vasco considera fundamental que todo este proceso se vea
acompañado por políticas abiertas y receptivas a la participación ciudadana. Por
este motivo, el Plan de Paz y Convivencia tendrá en éste ámbito un campo de
actuación destacado. En todo caso se buscará la practicidad y funcionalidad de
acciones concretas y efectivas de participación ciudadana.
-Acción 22. Procesos de colaboración con los agentes sociales
La Secretaría General de Paz y Convivencia buscará la colaboración expresa
con grupos de asociaciones que trabajan en el ámbito de la convivencia, las
víctimas, la paz y los derechos humanos para el desarrollo de objetivos
concretos y específicos en diferentes ámbitos como son el trabajo con los
Ayuntamientos, el trabajo con los centros educativos o el trabajo en materia de
participación ciudadana
·Programa XII. Cooperación con las instituciones europeas
-Acción 23. Consenso con las instituciones europeas
El plan de paz y convivencia será presentado a las instituciones europeas con
el objetivo de alcanzar un acuerdo o convenio de colaboración para su desarrollo
con el auspicio e implicación de la Unión Europea.
-Acción 24. Creación de espacio de cooperación interregional
El Gobierno Vasco tratará de crear un ámbito de trabajo conjunto en materia de
paz y convivencia con otras regiones europeas con intereses afines. De este
modo, se persigue que los trabajos que se desarrollen aquí en el ámbito de la
educación, la juventud, los ayuntamientos, las universidades o la participación
ciudadana puedan tener un espacio compartido de intercambio y proyección.
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13. ·Tres comentarios finales: Antecedentes, evaluación y permeabilidad
Quedan para el final tres subrayados importantes. El primero tiene que ver con
lo previo, el segundo con lo posterior, y el tercero con el carácter de este documento y
del proceso que se abre.
·Antecedentes
Con respecto a lo primero es preciso expresar el reconocimiento a la labor
realizada en las anteriores legislaturas. En muchas de sus partes este proyecto
es continuidad y desarrollo de ese trabajo previo que ha servido de base útil
para avanzar.
·Evaluación
El Plan de Paz y Convivencia será sometido a seguimiento y evaluación
periódica, mediante una sistematización de la proyección y aplicación de los
distintos programas. Esa evaluación será compartida con los grupos parlamentarios
y con las entidades sociales.
·Permeabilidad.
Desde el primer momento, este plan de actuación se presenta como un
documento permeable al consenso y a las aportaciones de los grupos
parlamentarios. Es una propuesta de trabajo abierta, dinámica y flexible para
encauzar la complejidad y la necesidad de consenso que presenta nuestra realidad.
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