1. REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD BICENTEBARIA DE ARAGUA
VICERRECTORADO ACADÉMICO
FACULTAD DE CIENCIAS ADMINISTRATIVAS Y SOCIALES
ESCUELA DE PSICOLOGÍA
SAN JOAQUÍN DE TURMERO- ESTADO ARAGUA
La CuLtura de Paz
Torrealba Maria José
C.I 25864389
Psicología II
2. La CuLtura de La Paz
La cultura de la paz consiste en una serie de valores, actitudes y comportamientos que rechazan la violencia
y previenen los conflictos tratando de atacar sus causas para solucionar los problemas mediante el diálogo y
la negociación entre las personas, las naciones, teniendo en cuenta un punto muy importante que son los
derechos humanos, pero así mismo respetándolos y teniéndolos en cuenta en esos tratados. Esta fue
definida por resolución de la ONU, siendo aprobada por la Asamblea General el 6 de octubre de 1999 en el
Quincuagésimo tercer periodo de sesiones, Acta 53/243.
Los principios rectores de la cultura de paz son fundamentales para instaurar un orden de justicia y
bienestar, pero no bastan en sí mismos para lograr la paz social, pues hace falta compromiso y acciones
concretas para darles vigencia. Cabe preguntarse, por lo tanto ¿de quién depende tal compromiso?
Indudablemente, los estados deben fortalecer la cultura de paz, promoviendo la plena vigencia de los
derechos humanos, utilizando la educación como una herramienta transformadora, trabajando para superar
las desigualdades y fortaleciendo las instituciones democráticas, es decir, tomando las medidas necesarias
para asegurar una convivencia pacífica. Sin embargo, la promoción de la paz no es una tarea exclusiva de
los estados, ya que la sociedad civil también está llamada a contribuir activamente en el reto de neutralizar la
violencia, de modo que se promueva y se practique la paz a nivel comunitario, vecinal, escolar, etcétera.
3. La cuLtura como aLternativa para
promover La paz
La paz es mucho más que la ausencia de guerra, requiere sociedades que vivan en equidad, libertad,
igualdad y solidaridad, entre otros valores; es por ello que la construcción de paz es un proceso que
comienza con la promoción de la cultura de paz, para que a través de la educación se instauren todos
esos valores asociados que permitan alcanzar la meta.
La cultura de paz guarda estrecha relación con los derechos humanos, pues al promover la comprensión,
el respeto y la solidaridad, es posible lograr una convivencia más justa, libre y respetuosa de la dignidad
humana. Claramente, se trata de una tarea compleja que requiere el compromiso de parte de las
autoridades, pero que sobre todo necesita el apoyo de todas y todos para generar cambios estructurales
que faciliten la convivencia en un contexto de plena vigencia de los derechos humanos.
Consolidar la cultura de paz es un trabajo arduo, que requiere de la intervención de diversos actores,
tanto públicos como privados, que se esfuercen por el arreglo pacífico de los conflictos, el respeto y el
entendimiento mutuos, la promoción de la democracia, la plena vigencia de los derechos humanos y las
libertades, la construcción del diálogo, la negociación, la búsqueda de consenso, la promoción del
desarrollo económico y social, la eliminación de toda forma de discriminación, entre otras muchas
acciones que demos tomar en cuenta para mantener y llevar la paz.
4. acciones para representar La cuLtura de
paz
La paz supone enseñar y aprender a resolver los conflictos. El conflicto está presente de forma permanente en nuestra
sociedad como manifestación de la diversidad de intereses y cosmovisiones. Los conflictos que suelen tener diversidad
de causas y argumentaciones: territoriales, culturales, económicas, socio laborales, etc.., tradicionalmente se resuelven
mediante el uso de la fuerza y mediante la imposición de la voluntad del más fuerte. No hay soluciones mágicas pero
hay mecanismos para resolver los conflictos de forma diferente y que forma parte de la cultura de la paz: Eliminación de
los factores socioeconómicos que pueden generarlo .
Desarrollo de una justicia nacional e internacional
Previsión del conflicto mediante la observación y política e intervenir para redimensionarlo.
Control y autocontrol de la agresividad.
Diálogo, negociación o mediación sin que obligatoriamente haya de haber vencedores y vencidos.
Estrategias y técnicas didácticas para educar en el aula.
Educar para la paz es una forma particular de educar en valores. Cuando educamos, consciente o
inconscientemente estamos transmitiendo una escala de valores. Educar conscientemente para la paz supone
ayudar a construir unos valores y actitudes determinados tales como la justicia, libertad, cooperación,
respeto, solidaridad, la actitud crítica, el compromiso, la autonomía, el dialogo, la participación. Al mismo
tiempo se cuestionan los valores que son contrarios a la paz como la discriminación, la intolerancia, la
violencia, el etnocentrismo, la indiferencia, el conformismo. Así la construcción de una cultura de la paz
fundamentada en los valores anteriores quiere decir que debe haber un compromiso social desde todas las
esferas generando políticas e intervenciones que los refuercen.
5. podemos decir que metodológicamente se debería intervenir desde los diferentes ámbitos de
influencia (escuela, medios de comunicación, ONG, movimientos asociativos, familias, etc..)
para :
Proporcionar situaciones que favorezcan la autoestima como base importante de las
relaciones personales y sociales.
Proporcionar situaciones que favorezcan la comunicación y convivencia con el interior y el
exterior de los contextos.
Participar en celebraciones y actos relacionados con la paz y solidaridad.
Crear climas democráticos en las aulas, centros y otros contextos de relación.
Fomentar la reflexión, el intercambio de opiniones y la argumentación como defensa.
Fomentar la comprensión de los puntos de vista de los compañeros
Consensuar y difundir las normas de convivencia.
Fomentar el trabajo en grupo y los proyectos colectivos.
Utilizar técnicas de reflexión y desarrollo moral: debates sobre experiencias, clarificación
de valores, discusión de dilemas, resolución de conflictos, dramatizaciones, juegos de
simulación, etc..
6. Aspectos promovidos por lA culturA de pAz
La Cultura de Paz tiene que preocuparse por el futuro. La prospectiva del futuro, a pesar de nuestras
limitaciones, es absolutamente necesaria. La despreocupación por la planificación conduce a una crisis
ineludible en los actores sociales, en las organizaciones y en las instituciones, cuando no al fatalismo, por el
desorden que se manifiesta. Las visiones e inercias tácticas y estratégicas conservadoras nos llevan al fatal
descontrol y aumento de la incertidumbre. La falta de comprensión, por parte de los actores sociales, de las
dinámicas de los cambios hace que la adaptación o adecuación a la nueva situación hasta alcanzar, en su
caso, un nuevo equilibrio, sea más difícil y más crítica. En consecuencia, el cuestionamiento de las creencias
fundamentales compartidas puede poner en peligro los estatus alcanzados, por lo que el conflicto se hace
inevitable. Cuando una crisis -como la crisis económica actual- ocasiona una pugna acerca de los objetivos,
las metas, o los medios para alcanzarlos, se producen irremediablemente tensiones y conflictos, pudiendo
degenerar algunos de ellos en la violencia.
Las propuestas de Paz más capaces de alcanzar el éxito son aquellas que están abiertas a los cambios que
permitan óptimos en los equilibrios dinámicos y, al mismo tiempo, puedan gestionar la conflictividad resultante
y emergente. Para lograr esta tensión creativa, este orden dentro del desorden, hacen falta instituciones y
normas de conducta que promuevan la adaptabilidad y no creen nuevos conflictos en la resistencia frente al
cambio.
7. Cultura de Paz es una idea que puede ser entendida con cierta facilidad gracias a los imaginarios
colectivos en los que se apoya y la necesidad de una cultura con capacidad de orientar e
implementar un mundo más pacífico. Creemos que ello es así porque gran parte de los seres
humanos practican y se hallan inmersos en dinámicas sociales con amplios contenidos de paz. Es
más, creemos que la mayor parte de la historia de la humanidad ha sido dirigida por la Paz, por la
Cultura de Paz. Igualmente, al ser promovida como un medio de gestión de la conflictividad, y
particularmente como antídoto de la violencia, la Cultura de Paz es rápidamente aceptada, lo que
se convierte en una gran ventaja. Sin embargo, si queremos ser más precisos, también eficaces,
es necesario profundizar en sus significados. Para ello nos vamos a detener inicialmente en los
contenidos dados por la Unesco para después hacerlo desde nuestro particular punto de vista,
que no es otro que aceptar la complejidad en que estamos insertos y pensar que Cultura de
Paz son todas aquellas acciones que promocionen los mayores equilibrios posibles.