Este documento habla sobre la Confirmación como un sacramento que perfecciona el Bautismo y nos convierte en testigos del amor de Dios. Nos da el don del Espíritu Santo para fortalecer nuestra fe y vivir según los valores de Jesús como el servicio, la compasión y la verdad. El Espíritu Santo nos guía a una relación más profunda con Dios como nuestro Padre amoroso.