La cuarta generación de computadoras se caracterizó por grandes avances tecnológicos como la introducción de los microprocesadores en un chip de silicio, lo que permitió que la cantidad de semiconductores aumentara y su velocidad incrementara mientras su precio disminuía. Además, en esta generación IBM se integró al mercado de las computadoras personales y se desarrolló el uso de las telecomunicaciones para la computación, sentando las bases para el surgimiento de Internet.