El documento analiza la identidad chilena, describiendo a la sociedad como gris, apática y formal. Se argumenta que los chilenos tienen un lenguaje deteriorado y son una sociedad consumista e imitativa. También se discrimina a los grupos minoritarios como los mapuches. En contraste, Paraguay promueve más su diversidad étnica a pesar de tener un porcentaje menor de población indígena. Finalmente, el documento concluye que los chilenos prefieren el consumo sobre actividades culturales y carecen de raíces culturales en comparación