El documento describe varios tipos comunes de delitos informáticos, incluyendo falsedades, sabotajes, fraudes, amenazas, calumnias, pornografía infantil, ataques a la privacidad e spam. Los delitos informáticos más comunes son falsedades como la fabricación de programas para cometer fraude, sabotajes que destruyen o alteran datos electrónicos, y fraudes que usan manipulación de datos para obtener ganancias ilegítimas.