El lanzamiento de martillo implica dar giros concéntricos al martillo para darle velocidad, comenzando desde una posición con los brazos extendidos y el martillo al frente. Se realizan de 3 a 4 giros sobre un solo pie, arrastrando el martillo hacia abajo, para luego lanzarlo con un movimiento de extensión de las piernas y halón de espalda hacia atrás y arriba, con los brazos extendidos horizontalmente. Al terminar el lanzamiento, el cuerpo experimenta desequilibrio que se contrarresta dando un paso