Julián Espósito comienza su diario contando que creció sin sus padres en un lugar llamado Casa de los Niños Expósitos. Aprendió a leer, hacer amigos y dejar atrás su pasado. Conoció a un amigo llamado Manuel que le enseñó sobre imprenta. Luego, conoció a Encarnación de quien se enamoró a primera vista. Mientras paseaban, Encarnación se asustó al ver un grupo de hombres con túnicas, uno con túnica blanca, y los llevó a su casa por la