El documento presenta una evaluación del profesor Alexander Boorques de Informática realizada por dos estudiantes de noveno grado. En la evaluación, los estudiantes indican que el profesor es gracioso, amable y siempre los ayuda, pero a veces se enoja mucho y solo explica una vez cuando lo hace mal. También permiten comer leche en clase pero no otras comidas, y solo da confianza a los estudiantes cuando los deja solos para ir a desayunar.