El documento describe el proceso de desertificación como la pérdida de la capacidad productiva de los ecosistemas debido a la actividad humana que supera la capacidad de carga de una región, lo que resulta en un suelo cada vez más estéril que pierde nutrientes y la capacidad de soportar vegetación. Esto lleva a que los residentes abandonen las tierras áridas en busca de nuevas regiones para vivir.