El documento describe la evolución del conocimiento humano desde formas pre-científicas hasta el conocimiento científico moderno. Explica que el conocimiento se ha vuelto cada vez más especializado debido al crecimiento exponencial de la información, y que la educación escolarizada es la principal forma de transmitir conocimientos entre generaciones. También destaca la importancia creciente de la investigación científica sistemática y la colaboración entre investigadores para avanzar el conocimiento.
1. El conocimiento y sus áreas
Mtro. Arturo Bonilla Sánchez
La importancia social del conocimiento
El conocimiento es esencialmente un producto social que no niega lo individual,
el cual se construye mediante el intercambio de experiencias e ideas entre los
miembros de la sociedad a través de las distintas formas de actividad humana,
y es examinado y probado en el mismo proceso y por lo mismo es producto de
la amalgama e interinfluencia de conocimientos individuales. Hay dos tipos de
conocimientos: los que se derivan de la observación y relación con la
naturaleza (ciencias naturales) y el que proviene de la observación de las
formas de organización entre los grupos humanos (ciencias sociales). Así
mismo como parte de la cultura, el ser humano siempre ha tenido necesidad de
expresar su subjetividad a través de las artes.
Todas las actividades humanas requieren de conocimientos. Todos los seres
humanos no están quietos ni son pasivos con lo cual acumulan experiencias de
su entorno natural y social y ello da lugar a conocimientos, los que día con día
se modifican y se acrecientan, por ello el proceso de conocimiento es
cambiante y en esa misma medida se enriquece, amplía y profundiza, de
manera tal que surgen ideas nuevas sobre algo que previamente no era
conocido o era parcialmente conocido. El avance del conocimiento por lo tanto
da lugar a aceptar nuevas ideas, a confirmar otras y hasta desechar otras más,
por ello, para alcanzar el conocimiento debemos reemplazar la ignorancia o las
ideas falsas por verdaderas. Accedemos, pues, al conocimiento, sólo en cuanto
desarrollamos las ideas de tal forma que su correspondencia con la realidad
sea probada.
En el proceso del conocimiento el hombre adquiere el saber, asimila conceptos
acerca de los fenómenos reales, va comprendiendo el mundo circundante.
Dicho saber se utiliza en la actividad práctica para transformar el mundo, para
utilizar la naturaleza a las necesidades del ser humano.
El conocer mismo constituye un momento necesario de la actividad práctica de
la sociedad, pues dicha actividad es propia de los hombres y éstos la realizan
basándose en el conocimiento de las propiedades y en las funciones de cosas
y objetos.
Hasta antes de que aparecieran las ciencias naturales o sociales los seres
humanos aprendían de tres maneras: aprender usando, que surge cuando el
hombre no sabía producir sólo sabía recolectar frutos, cazar y pescar; más que
producir, recogía lo que la naturaleza le daba, es decir, lo que la naturaleza
ofrecía. Así, los seres humanos aprendían usando lo que la naturaleza les
daba, por ejemplo en la selección de vegetales para discriminar cuales eran
alimenticios o medicinales o cuales dañaban el organismo, o bien, qué pieles
de los animales que cazaban eran más resistentes y calentaban más, etcétera.
2. Una segunda manera del aprendizaje se dio con la producción, entendiendo
por producción algo que la naturaleza ya no ofrecía, pero que los individuos
requerían; por lo tanto, éstos se sintieron impulsados a transformar los
materiales o los objetos de la naturaleza para hacerlos útiles por ejemplo: un
hacha, un cuchillo, una coa, la arcilla, etcétera. Este método de aprendizaje se
denomina aprender haciendo y es la experiencia práctica, que es la
acumulación de ideas que se da en el proceso de producción de objetos, ya
sea para el uso o para la venta. Con la experiencia se van corrigiendo errores y
perfeccionando los productos.
Otra forma de aprendizaje es la imitación, copiando y muchas veces mejorando
lo que otros hacían. La imitación se hace a través de la observación, pero como
los hombres que imitan no son pasivos, pueden mejorar lo que copian, o
también pueden hacer una mala imitación.
Las tres formas de aprendizaje mencionados previamente son pre-científicos;
en el curso de la historia poco a poco se fue pasando del conocimiento pre-
científico al conocimiento científico, con la creación del último método más
reciente y más avanzado de aprendizaje que es el aprender investigando, el
cual vino a provocar un aceleramiento enorme en la acumulación de
conocimientos, hasta el punto de que hay quienes hablan de la existencia de
una revolución científico-técnica; en efecto, cualitativamente hay un gran
cambio derivado de la especialización en donde grupos de personas
(investigadores) se ocupan a lo largo de su vida a la producción de
conocimientos.
En sus fases iniciales la producción de conocimientos se hacía por sólo uno,
dos o tres investigadores, solían hacerlo a veces a ratos, o por días y
excepcionalmente como una profesión de la cual vivir. Sin embargo, de esa
forma rudimentaria y esporádica de investigar, poco a poco se pasó a la etapa
de la masificación de la producción de conocimientos, mediante la creación de
laboratorios, centros e institutos de investigación, lugares en donde se emplea
a decenas de investigadores y a veces a cientos de ellos. Cada uno de estos
centros de investigación son especializados y en su organización se crean
subespecializaciones.
Para facilitar el avance de las investigaciones, es común que los científicos
realicen juntas, por ejemplo una vez a la semana para intercambiar
experiencias respecto a los problemas, obstáculos y avances que lograron.
Con ese mismo fin también suelen asistir de vez en vez a simposios,
seminarios o congresos en donde se intercambian experiencias y se localiza a
otros colegas interesados en la temática que se trabaja por otro grupo de ellos.
En la actualidad ya se usa otro medio electrónico como lo es Internet, en donde
se han creado grupos de intercambio y discusión de temas específicos. El uso
de este medio permite la vinculación de investigadores, quienes pueden estar
cerca o a miles de kilómetros y realizar intercambios a un costo bajísimo.
El método de aprender investigando no desecha los métodos de aprender
haciendo, aprender imitando y aprender usando; antes al contrario, los supera
3. y suele utilizarlos. Esa superación se hace sobre todo mediante el intercambio
de experiencias entre quienes aplican los conocimientos a la producción -
tecnólogos- y con quienes hacen y dirigen la producción y entre quienes
consumen lo producido a efecto de ir corrigiendo fallas.
El investigador parte de la observación, y más específicamente de la
experimentación, en donde el observador tiene un control casi total de los
condicionantes del proceso que quiere investigar. El aprender investigando se
lleva a efecto con métodos, en donde el investigador hace planteamientos
respecto a lo que quiere estudiar; para ello realiza su revisión bibliográfica
sobre lo que va a investigar, construye sus hipótesis, objetivos, define sus
variables, su procedimiento para comprobar o desechar su hipótesis, para
finalmente llegar a resultados con los cuales hace su reporte, informe, artículo
o libro. Una característica de la investigación es su incertidumbre, pues puede
descubrirse algo inesperado que puede ser positivo o negativo.
Por lo anterior, el desarrollo del conocimiento es un producto de la asociación
humana y es así desde que los hombres empezaron a formar sus primeras
ideas en el proceso de producción, hasta la época actual en que predomina la
producción masiva de conocimientos.
En la sociedad moderna la forma más avanzada que tienen las empresas, los
países, los hombres para mejorar sus medios de vida sigue siendo estos
métodos, de tal manera que se conjugan. El aprender haciendo y sobre todo el
aprender investigando, son los que más se han desarrollado en los últimos 200
años desde la Revolución Industrial, tanto en el mejoramiento tecnológico que
las industrias requieren para que sus productos puedan ser competitivos en el
mercado nacional e internacional, como también se avanza infortunadamente
en la producción de conocimientos para la construcción de armas cada vez
más letales.
Como quiera que sea, la producción masiva de conocimientos es un proceso
desigual, según las características de cada país, pues la producción masificada
de conocimiento exige dos factores: una primera precondición es la
masificación de la enseñanza universitaria como ha sucedido en los países
avanzados, como por ejemplo España, que tiene 40% de jóvenes entre 20 y 24
años en el sistema universitario y hay países que logran hasta 50 y 60%, a
diferencia de los países con desarrollo menor y economías dependientes como
México, en donde a pesar de los esfuerzos en este sentido, sólo 15% de los
jóvenes tienen acceso al conocimiento en la educación superior. La
masificación de la enseñanza universitaria sirve así para proveer de
especialistas que se dedicarán a la investigación, ya sea en las ciencias
básicas o en las aplicadas, para el mejoramiento de procesos tecnológicos,
como de profesionistas que dirijan y operen industrias altamente desarrolladas.
Una segunda precondición es la masificación de centros e institutos de
investigación.
4. El conocimiento científico
En un principio los conocimientos surgieron de la producción y del consumo,
pero les caracterizaba a menudo el estar sueltos, vagos, poco consistentes e
imprecisos y casuísticos; a veces se les vinculaba a fenómenos mágicos o
sobrenaturales, esto es, casi no se podían hacer generalizaciones y, por ende,
no se podían construir sistemas teóricos. A pesar de esos obstáculos, los
conocimientos poco a poco se fueron independizando parcialmente de la
producción y del consumo para formar cuerpos de ideas propios. Es decir, el
conocimiento se hace científico cuando se genera un cuerpo sistemático de
generalizaciones (abstracciones) que sirven para encontrar los principios y
leyes que rigen las propiedades observadas y los movimientos de los objetos o
fenómenos estudiados y predecir las consecuencias de los mismos.
De ese modo y de forma paulatina se van forjando las ciencias, su avance fue
desigual, con cambios a veces graduales pero también súbitos, incluso algunos
fueron radicales. Se les llama así por sus enormes repercusiones en la
producción y en la sociedad, como son los casos del control del fuego, la
rueda, la pólvora, la caldera, el motor de explosión, y las computadoras, entre
otros varios ejemplos.
Las ciencias naturales tienen como objetivo descubrir la esencia de los
fenómenos de la naturaleza, conocer sus leyes y prever sobre su base los
nuevos fenómenos, así como señalar las posibilidades de aplicar en la práctica
las leyes sobre la naturaleza, que han sido conocidas, por ello es que con el
conocimiento científico se busca la verdad sobre los objetos y procesos
naturales o sociales. Lo verdadero o lo falso de un conocimiento sólo se puede
detectar si, y sólo si, se le somete a su comprobación en la realidad.
Las ciencias sociales tienen como objetivo el estudio de los grupos humanos ya
sea en su devenir histórico o en sus relaciones, o bien en su organización
social, y los cambios que se operan en ella, o las causas que provoquen esos
cambios: guerras, huelgas, revoluciones o bien modificaciones menores como
las reformas.
El conocimiento escolarizado
A lo largo del desarrollo de la humanidad se ha acrecentado el conocimiento,
de tal manera que hoy en día existe un cúmulo gigantesco de conocimientos
los que a su vez son crecientes. Ese enorme mar de conocimientos, producto
de los seres humanos, es imposible de conocer en su cabalidad por los propios
seres humanos. No alcanzaría la vida para asimilar todos los conocimientos
generados. Por lo tanto, la experiencia histórica ha demostrado que la forma de
transmitir a las generaciones futuras ese conocimiento es mediante la
parcelación del mismo.
En la antigüedad, por ejemplo, un filósofo podía tener algunos conocimientos
de lo que posteriormente llegaría a constituirse en ciencias: matemáticas,
historia, literatura, medicina, física, química, sociología, economía, política,
5. artes, etcétera. No todos los filósofos llenaban esos campos, pero para algunos
de ellos no era problema pasar de lo filosófico a las matemáticas, de la física a
la química, de la medicina a la sociología etcétera. En la antigüedad, hubo
filósofos que se dedicaban más a alguna rama del conocimiento según sus
propias inclinaciones personales. Pero en nuestros días los conocimientos se
han acumulado en gran magnitud y profundidad, por ello ya no puede haber
alguien que tenga conocimiento de todo, por culto que sea. Se requiere de la
especialización, y ésta es la única manera de superar el problema que
enfrentamos, la cual consiste en que aunque quisiéramos saber de todo no
podemos saberlo todo, sólo una parte. Es decir, la especialización es producto
de una necesidad social, al haber crecido tanto el conocimiento, de modo que
sólo así se tiene acceso al mismo, para estar en condiciones de su desarrollo
posterior.
El conocimiento crece en la medida de que las nuevas generaciones superan a
las anteriores sobre la base de una mayor especialización. En el futuro habrá
un mayor número de especializaciones como único medio que permite avanzar,
generar nuevos conocimientos, que a su vez servirán de base a las
generaciones que les siguen. Como es de comprenderse las generaciones
anteriores no fueron más tontas que la actual, ni la de hoy día será menos
inteligente que las futuras. La diferencia, entonces, estriba en que cada vez las
generaciones sucesivas se especializan más.
Otro problema que se tuvo que enfrentar consistió en cómo resolver la
transmisión de conocimientos de una generación a otra. El problema se
agrandaba en la misma medida en que el cúmulo de conocimientos
aumentaba.
La manera en que se transmitían los conocimientos durante siglos fue pasar los
mismos de padres a hijos, pero conforme los conocimientos fueron creciendo,
ya no era suficiente ese método tradicionalmente seguido, hasta que hubo la
necesidad de crear otra manera de transmitirlos. Ello se logró con la
introducción del sistema de enseñanza escolarizada, el cual, por sus ventajas,
posteriormente se generalizó como método principal, aunque no único, pero se
comprobó que era y es todavía la forma más rápida y expedita de transmisión
de conocimientos de generaciones pasadas a la presente. El sistema de
enseñanza escolarizado se divide en tres partes, el elemental, el intermedio y
el de enseñanza superior o el universitario, que viene a ser su cúspide.
Esa cúspide esta dada por el grado de avance de las ciencias en el país de que
se trate y de la universidad respectiva, por lo tanto, las carreras universitarias
constituyen el más importante paso para dotar al estudiante de la
especialización que haya elegido de entre las diversas áreas del conocimiento
que una institución de enseñanza superior pueda ofrecer.
De lo dicho se desprende entonces que, entre un mayor número de carreras
haya, concomitantemente habrá también tantas especializaciones. La
culminación de una carrera profesional da pie para que ese estudiante
preparado en su especialización -durante su periodo de estudio- entre a la fase
productiva de su vida. Esto supone que el entorno social es favorable, pero hay
6. veces que no es tan favorable por la crisis económica; aún así el estudiante
que termina la carrera está en mejores condiciones para defenderse, a
diferencia de otros que no lo lograron.
La enseñanza universitaria se convierte así en el medio más expedito para que
en el curso de cuatro o cinco años, o a veces más, se le pueda transmitir al
educando un conjunto de conocimientos que se han venido forjando y
depurando a lo largo de muchísimos años. Por supuesto en esos cuantos años
se le impartirán conocimientos que fueron adquiridos gracias a las aportaciones
de generaciones enteras. Así mismo no se le transmitirán los conocimientos
que ya se desecharon con los avances habidos. Al estudiante universitario por
lo mismo se le transmite un conocimiento compactado y actualizado hasta
donde ello es posible.
De ese modo, en forma compacta y sintética a lo largo de la carrera se
adquiere un conocimiento de una parte de la ciencia hasta donde dan de sí los
límites establecidos por la institución, ello no quiere decir que ya se llegó al
límite del conocimiento científico. Dicho límite para el desarrollo de las ciencias
no existe, las ciencias se siguen desarrollando y en efecto, llegan a un límite, el
cual se rompe cotidianamente mediante la investigación. Para ello está la
investigación científica y social.
Aquí ya no hay un sistema escolarizado, aún cuando algo se avanza en esa
dirección por parte de las universidades creando maestrías y doctorados. Pero
aún así no hay límite para la ciencia; ésta seguirá avanzando con la
investigación.
El gran reto: La etica sobre la ciencia
Las generaciones presentes y futuras irán adquiriendo cada vez una mayor
responsabilidad moral respecto al destino mismo de los seres humanos, puesto
que, conforme se avance en una mayor acumulación de conocimientos, y en la
medida en que esos se vayan generalizando a un número cada vez mayor de
personas, tendrán la obligación de analizar las consecuencias que los
presentes y futuros conocimientos puedan acarrear, ya sea para evitar y
reponer el deterioro del medio ambiente que nos circunda, o para destruirlo
más aceleradamente, como por desgracia ha estado ocurriendo en las últimas
décadas. Por ejemplo, con los medios modernos altamente tecnificados con
que se cuenta, ya es posible talar todos los árboles de la Tierra en unos
cuantos días, o también con medios avanzados de pesca se puede acabar
rápidamente con una gran cantidad de especies marinas.
Así mismo no es menos grave el hecho de que ya es posible, con los nuevos
inventos que se han producido desde hace 50 años, poder destruir a los
propios seres humanos, a toda la flora y la fauna con las invenciones de la
bomba atómica, la de hidrógeno, la de neutrones, los misiles, las armas
químicas, las bacteriológicas y los más recientes inventos como los de la
guerra cibernética en donde principalmente se recurre a los medios de la
microelectrónica. Como es sabido, en la actualidad es una de las ramas de
mayor dinamismo de la ciencia y la tecnología.
7. El avance de la tecnología es tan rápido que el equipo construido en el curso
de uno a dos años se hace rápidamente obsoleto. Mientras estos nuevos
instrumentos electrónicos sirvan para fines pacíficos, no hay problema, así
debiera ser, pero cuando estos nuevos inventos aceleran la capacidad
destructiva, entonces se va por un camino equivocado. En consecuencia, la
responsabilidad social de los universitarios y en especial de los científicos
aumenta en mayor escala.
Nuestra obligación tanto para educadores como para educandos, es canalizar
las investigaciones para favorecer e impulsar una mejor forma y calidad de
vida, de modo tal, que ni se creen más medios destructivos de seres humanos,
ni se usen nuevos y más conocimientos con su tecnología respectiva, que
aceleren la destrucción del medio ambiente y de la humanidad. Ese es el gran
reto, en donde la ética se debe imponer a la ciencia.
La UNAM
En la Universidad Nacional Autónoma de México la organización académica
agrupa las carreras en torno al conocimiento científico y las humanidades, a
través de los Consejos Académicos de Area, desglosándose éstos en:
I. Consejo Académico del Área de las Ciencias Físico Matemáticas y de
las Ingenierías.
II. Consejo Académico del Área de las Ciencias Biológicas y de la Salud.
III. Consejo Académico del Área de las Ciencias Sociales.
IV. Consejo Académico del Área de las Humanidades y de las Artes.