El documento describe la importancia histórica del dibujo como mecanismo de enseñanza y expresión artística. Explica que el dibujo ha sido erróneamente enseñado como una herramienta lineal auxiliar en lugar de un proceso mental que involucra la percepción de la realidad. También discute cómo los artistas modernos han vuelto a utilizar materiales de dibujo tradicionales para transmitir ideas a través de representaciones figurativas.