La líder de la junta de vecinos se siente agotada debido a las constantes quejas de los residentes sobre la limpieza, vigilancia e iluminación. Aunque ha tratado de escucharlos de manera paciente, recibe llamadas incluso de madrugada. Considera renunciar al cargo, pero primero intentará organizar una reunión social para mejorar la empatía entre los vecinos y cambiar el enfoque de quejas a uno más positivo.