El estudiante describe haber disfrutado de los elefantes en el circo cuando era niño. Explica que a pesar de su gran tamaño y fuerza, los elefantes parecían sometidos al estar encadenados a una pequeña estaca en el suelo. El elefante no intentaba liberarse porque había aprendido que sus esfuerzos eran inútiles, aunque físicamente podría arrancar la estaca con facilidad. De manera similar, las personas a menudo se sienten limitadas por creencias sobre lo que pueden y no pueden hacer, bas

1. Unidad Educativa Municipal Experimental Milenio Bicentenario
Prueba de computación
Año lectivo 2012-2013
1 Aarón Conrado 8vo
“A”
El elefante sumiso
Cuando era chico me gustaba ir a los circos. De todos los animales el que más me
gustaba era el elefante. Mientras la función continuaba el elefante impresionaba a
todos por su tamaño, peso y fuerza. Después de la actuación y hasta un rato antes
de volver frente al público podíamos encontrarlo al elefante detrás de la carpa
principal, con una pata encadenada a una pequeña estaca clavada en el piso.la
estaca era un pequeño pedazo de madera, apenas enterrado superficialmente.
Aunque la cadena era gruesa y poderosa, me parecía obvio que ese animal,
capaz de botar un árbol, podría arrancar la estaca y huir. Este elefante enorme y
poderoso no es capaz porque cree que no puede hacerlo. Tiene grabado en la
mente el recuerdo de sus inútiles esfuerzos de entonces, y ha dejado de luchar.
Nunca más trato de poner a prueba su fuerza. Cada uno de nosotros es un poco
como ese elefante: vamos por el mundo atados a cientos de estacas que nos
restan libertad. Creemos que no podemos con un montón de cosas, simplemente
porque alguna vez probamos y no pudimos. Grabamos en nuestra mente esas
palabras: no puedo, nunca podré. La única manera de saber cuáles son nuestras
limitaciones ahora es intentar de nuevo, poniendo en ello todo el corazón.