El documento analiza los estereotipos de género presentes en la publicidad, los cuales muestran a la mujer como obsesionada con la limpieza del hogar, la cocina y el cuidado de los niños. Sin embargo, esta representación no refleja la realidad, donde tanto hombres como mujeres comparten las responsabilidades del hogar y la familia. Además, las publicidades a menudo humillan o sexualizan a la mujer, perpetuando roles de género desactualizados.