El karate es una disciplina que desarrolla el espíritu y la energía interior de la persona. Más que una técnica de defensa, enseña una filosofía de vida basada en el respeto y la moral. Sus orígenes se remontan a la India y China, donde se perfeccionó, y luego fue transmitido a Okinawa y Japón, donde Funakoshi estableció las primeras clases formales siguiendo principios de corrección, lealtad, superación personal y respeto.