La Asamblea Nacional de Ecuador aprobó una nueva Ley de Comunicación que establece regulaciones para los medios y periodistas y castiga el "linchamiento mediático", definido como la difusión concertada y reiterada de información con el propósito de desprestigiar o reducir la credibilidad de una persona u organización. La ley traspasa la recepción de denuncias de linchamiento mediático de la Supercom a la Defensoría del Pueblo. Además, propone la creación de un Observatorio de Derechos Humanos y una reclasificación