El pequeño niño aprendió a seguir las instrucciones de su maestra en su primer colegio. Al principio, disfrutaba dibujando y trabajando con arcilla de forma libre, pero luego aprendió a hacer las cosas de la misma manera que su maestra le mostraba para que todos estuvieran iguales. Cuando se mudó a un nuevo colegio, se sintió confundido porque su nueva maestra no daba instrucciones específicas, sino que los dejaba crear libremente.