Joaquín era un niño travieso que decidió convertirse en inventor. Trabajando día y noche con objetos viejos y regalos de su tía, creó diez animales de juguete: un hipopótamo con un rallador, un bicho feo con plumero y ramitas, un ratón llamado Enrique con un teléfono viejo, un león manso llamado Teodoro, un aguacate llamado Don Aguacate, un despertador cantor con reloj y bocina, un conejo malhumorado llamado Bartolo con una lámp