2. ¿Qué es una Enfermedad Profesional?
Una Enfermedad Profesional es aquella que es causada, de manera directa, por el
ejercicio del trabajo que realice una persona y que le produzca incapacidad o muerte. Para
ser considerada como Enfermedad Profesional, debe existir una relación causal entre el
quehacer laboral y la patología que provoca la invalidez o la muerte.
La definición de la enfermedad profesional contiene por tanto dos elementos
principales:
La relación causal entre la exposición en un entorno de trabajo o actividad laboral
específicos, y una enfermedad específica, y
El hecho de que, dentro de un grupo de personas expuestas, la enfermedad se
produce con una frecuencia superior a la tasa media de morbilidad del resto de la
población.
La Enfermedad Profesional viene definida en el Art. 116 de la Ley General de Seguridad
Social:
“la contraída a consecuencia del trabajo ejecutado por cuenta ajena en las actividades
que se especifiquen en el cuadro que se apruebe por las disposiciones de aplicación y
desarrollo de esta Ley, y que esta proceda por la acción de elementos o sustancias que en
dicho cuadro se indiquen para cada enfermedad profesional”.
Como identificar una enfermedad Laboral.
Criterios generales para la identificación y el reconocimiento de las enfermedades
profesionales:
1. La relación causal se establece sobre la base de: datos clínicos y patológicos;
información básica sobre la ocupación y un análisis del empleo; identificación y evaluación
de los factores de riesgo de la ocupación considerada, y el papel que desempeñan otros
factores de riesgo.
2. Los datos epidemiológicos y toxicológicos son útiles para determinar la relación causal
que existe entre una enfermedad profesional específica y la exposición correspondiente
en un entorno de trabajo o actividad laboral específicos.
3. Por regla general, los síntomas no son lo suficientemente característicos para permitir
el diagnóstico de una enfermedad profesional si no se conocen los cambios patológicos
provocados por los factores físicos, químicos, biológicos o de otro tipo a que están
expuestos los trabajadores en el ejercicio de una ocupación.
3. 4. Por lo tanto, es normal que cuanto mejor se conozcan los mecanismos de acción de los
factores mencionados, el aumento constante del número de sustancias utilizadas, y las
características y variedad de los agentes de los que se sospecha, más fácil resultará hacer
un diagnóstico preciso, y al mismo tiempo ampliar la lista reconocida de enfermedades de
origen profesional.
5. El reconocimiento de una enfermedad como profesional es un ejemplo concreto de
toma de decisión en materia de medicina clínica o de epidemiología clínica aplicada.
Decidir sobre el origen de una enfermedad no es una «ciencia exacta», sino una cuestión
de criterio basada en un examen crítico de todas las evidencias disponibles, entre los que
se deben incluir los siguientes:
Intensidad de la asociación. Cuantos mayores sean los efectos de la exposición en
la frecuencia o el desarrollo de una enfermedad, mayores serán las probabilidades
de que exista una relación causal entre la exposición y ese desarrollo o frecuencia.
Concordancia. Diferentes informes de investigación que desembocan en resultados
y conclusiones similares en términos generales.
Especificidad. La exposición a un factor de riesgo específico se traduce en un
patrón claramente definido de la enfermedad o las enfermedades.
Relación o secuencia temporal. Entre la exposición considerada y la aparición de la
enfermedad transcurre un período de tiempo compatible con cualquier
mecanismo biológico propuesto. Gradiente biológico. Cuantos mayores sean el
nivel y la duración de la exposición, mayor será la gravedad de las enfermedades o
su incidencia.
Plausibilidad biológica. De acuerdo con los conocimientos que hoy se tienen sobre
las propiedades toxicológicas y químicas y otras características físicas del riesgo o
peligro estudiado, es racional afirmar, desde el punto de vista biológico, que la
exposición conduce al desarrollo de la enfermedad.
Coherencia. Se logra cuando a partir de una síntesis de todas las evidencias (por
ejemplo, estudios de epidemiología humana y animal) se deduce la existencia de
una relación causal en el sentido amplio y según el sentido común.
Estudios de intervención. En algunos casos, una prueba preventiva básica permite
verificar si la supresión de un peligro determinado o la reducción de un riesgo
concreto del entorno de trabajo o de la actividad laboral impide el desarrollo de
una enfermedad específica o reduce su incidencia.
Disco cervical:
Una causa común del dolor de cuello, hombro y brazo, es una hernia o ruptura de un
disco. Los síntomas pueden incluir un dolor sordo o agudo en el cuello o entre las
4. "paletas" de la espalda, dolor que irradia hacia abajo en dirección del brazo, la mano o los
dedos, o entumecimiento u hormigueo en el hombro o brazo. Ciertas posiciones o
movimientos del cuello pueden intensificar la ruptura.
Los síntomas de una hernia de disco cervical muchas veces se parecen a otros trastornos
como el síndrome del túnel del carpo, los problemas del manguito rotador y la gota. En
algunos pacientes las hernias de disco cervical pueden ocasionar compresión de la médula
espinal en los sitios donde el material del disco presiona a la médula espinal. Esta es una
patología mucho más seria y puede requerir un plan de tratamiento más agresivo. Los
síntomas de compresión medular incluyen una marcha torpe o con tropiezos, dificultad
con las habilidades motoras finas en las manos y los brazos y hormigueo o una sensación
de "choque" a lo largo del torso y hasta las piernas.
Hombro doloroso (síndrome de pinzamiento)
Según definición, el término síndrome de pinzamiento es la función o movilidad
restringida de una articulación causada principalmente por el dolor. El pinzamiento (del
inglés impingement = choque, colisión, empujón) afecta a menudo a los hombros, pero
también puede aparecer en otras articulaciones, como por ejemplo la cadera.
Los términos “síndrome de compresión” y “tendinitis del manguito de los rotadores”
hacen referencia a la causa del dolor. Con algunos movimientos y en determinadas
posiciones no hay espacio suficiente para alojar sin dificultades todas las estructuras
existentes. En la mayoría de casos el espacio de debajo el techo del hombro (espacio
subacromial) se estrecha y el tejido empuja contra el techo del hombro (acromion) o se
queda atrapado en él. El acromion es un saliente óseo del omoplato que se encuentra
arriba de la articulación del húmero. En caso de pinzamiento del hombro, los médicos
hablan de síndrome de pinzamiento subacromial.
Se distinguen dos tipos:
1. Pinzamiento primario o impingement de salida
2. Pinzamiento secundario o impingement no de salida
En el caso del impingement de salida del hombro, el espacio de debajo del techo del
hombro se estrecha por causas mecánicas. Algunas de ellas son una espuela ósea o un
techo del hombro en forma de gancho o demasiado inclinado. En el caso
del impingement no de salida la falta de espacio debajo del techo del hombro se debe a
otras causas como, por ejemplo, las siguientes:
Inflamación crónica de la bolsa sinovial (bursitis),
Daños en el tendón largo del bíceps,
5. Rotura del manguito rotador o
Biomecánica alterada (por ejemplo, rigidez de hombros o desequilibrio muscular).
En el caso del desequilibrio muscular también se habla de un pinzamiento funcional del
hombro. El denominado tendón supraespinoso es a menudo el responsable del dolor
manifestado en el síndrome del hombro doloroso.
Pinzamiento del Hombro (Pinzamiento Subacromial):
Es un atrapamiento crónico con fricción de un grupo de tendones del hombro
conocidos como Mango Rotador (músculos supraespinoso, infraespinoso, subescapular y
redondo menor). Este grupo de músculos se encuentran en la parte profunda del hombro
y se encargan de la movilidad fina de este.
Estos tendones pasan por un espacio muy cerrado que se llama Espacio
Subacromial formado por dos huesos, la cabeza del húmero y el Acromion (que pertenece
al omóplato o escápula).
¿Cómo ocurre?
El Espacio Subacromial puede disminuir por desgaste, por degeneración o ruptura
del Mango Rotador, por un desbalance muscular y por actividades o problemas que hacen
que la cabeza del húmero suba (actividades repetidas por arriba de la cabeza). Al hacerse
más pequeño este espacio, los tendones empiezan a atraparse y lastimarse entre los dos
huesos. En ese mismo espacio, hay una bolsa llena de líquido (Bursa) que se encarga de
amortiguar la fricción. Esta generalmente se inflama y engrosa por el mismo fenómeno de
pinzamiento y puede producir dolor en el hombro, especialmente al subir el brazo. El
pinzamiento puede llevar a una inflamación crónica con calcificación de los tendones lo
cual es muy doloroso, o a la ruptura del Mango Rotador.
SÍNDROME DEL TUNEL CARPIANO
El túnel carpiano es un canal o corredor en la cara anterior o flexora de la muñeca,
situado entre los huesos de la muñeca y el ligamento anular del carpo, por el cual pasan
los tendones flexores de los dedos y el nervio mediano.
El síndrome del túnel carpiano es una enfermedad que produce daño del nervio
mediano. Si existe, por cualquier causa, un aumento de la presión dentro de ese túnel
carpiano se puede producir una lesión en dicho nervio.
Los casos leves pueden evolucionar favorablemente con tratamiento mediante
inmovilización de la muñeca o con la inyección de corticoides. En casos más
6. Ejemplos:
la lista de enfermedades profesionales, podemos destacar que están dividas en 6 grupos
(Real Decreto 1299/2006) según su causa, estas pueden ser originadas por agentes
químicos (Grupo 1); agentes físicos (Grupo 2); agentes biológicos (Grupo 3); por inhalación
de sustancias y agentes no comprendidos en otros apartados (Grupo 4); enfermedades de
la piel causadas por sustancias y agentes no comprendidos en algunos de los otros
apartados (Grupo 5); enfermedades de la piel causadas por agentes carcinógenos (Grupo
6).
Las enfermedades profesionales más comunes:
1. Fatiga visual, por una exposición a lo largo del tiempo a las pantallas de
ordenadores, tabletas, televisiones, etc., los síntomas pueden ser pesadez y picor
de los ojos, dolor de cabeza, entre otros.
2. Dolor de espalda, después de muchas horas sentado la mala posición puede
afectar a la espalda, provocando dolor de cuello, cervicales, hombros, etc.
3. Estrés, primera causa de absentismo laboral y como consecuencia responsable de
la disminución de la productividad, entre los síntomas más habituales se encuentra
la cefalea y las migrañas.
4. Síndrome de fatiga crónica, se trata de un cansancio prolongado que no se alivia
con el descanso, como sintomatología se puede encontrar la pérdida de
autoestima, abandono de tareas, insomnio, pereza, etc.
5. Síndrome de túnel carpiano, pérdida de fuerza en las manos causada por la flexión
reiterada de la muñeca, produce dolor en muñeca y codo pudiendo derivar en
tendinitis.
Todos estos ejemplos de enfermedades profesionales más comunes afectan a buena parte
de profesiones y empleos, sin distinción del sector económico. A esto se une la aplicación
masiva de nuevas tecnologías en todas las tareas laborales y organizacionales, generando
la aparición de nuevos riesgos laborales con alteraciones de la salud totalmente distintas.
Con todo ello, y para concluir, debemos indicar que muchas de las enfermedades
profesionales no son tenidas en cuenta como tal y pasan por enfermedades comunes, con
lo cual los datos y los porcentajes no siempre ofrecen un diagnóstico completo y veraz de
los riesgos, accidentes y enfermedades que se producen a diario en el ámbito laboral. Por
ello, el conocimiento de las mismas y la prevención se tornan fundamentales para
mantener y mejorar nuestra salud en el trabajo y, por ende, en nuestra vida.