La ingeniería financiera se está estableciendo como una disciplina útil para enfrentar los desafíos del riesgo y la inestabilidad en el contexto económico actual. Aunque su conceptualización teórica ha quedado rezagada, se enfoca en el diseño práctico de instrumentos financieros. La ingeniería financiera se basa principalmente en el manejo del dinero y el tiempo, por lo que las matemáticas financieras proporcionan una herramienta práctica aunque imperfecta para apoyar la toma de decisiones financieras.