El documento resume la reforma agraria en México después de la Revolución de 1910. Explica que la reforma consistió en la redistribución de tierras del latifundio y la provisión de crédito y ayuda estatal a los nuevos pequeños propietarios. También describe los cambios en las relaciones sociales y económicas del campo mexicano, incluyendo la creación de ejidos como unidades de propiedad colectiva de la tierra.