El documento presenta una aproximación sociodemográfica al barrio de Universidad en Madrid. La población del barrio tiene una distribución más concentrada en edades medias y adultas que la ciudad en general. Aunque la distribución por sexo es equitativa, hay más mujeres mayores de 60 años que hombres. Los inmigrantes en el barrio provienen en su mayoría de Europa del este y América Latina, en contraste con el resto de la ciudad donde son más comunes los inmigrantes del norte de África y Asia. El nivel educativo y
3. 1
1. Introducción.
Lejos de sus días de rebeldía, el barrio madrileño de Universidad, llamado Hospicio en
el XIX por el asilo barroco de Pedro de Ribera (hoy Museo de Historia), y también
barrio de Maravillas en el XVIII, por las flores que abundaban en sus balcones, lucha
por renovar la reputación alternativa que se ganó durante “La Movida”. Entre boutiques,
tiendas de magdalenas y nuevos expositores de cuadros contemporáneos que parecen
sacados de Amélie, también surgen propuestas menos comerciales.
Desde hace ya un tiempo el barrio está dejando de lado su pasado para convertirse en el
sitio de moda, este proceso ha supuesto conflictos entre los nuevos y los viejos
habitantes, y lo cierto es que el perfil habitacional y comercial ha ido cambiando.
Negocio, ocio y cultura se mezclan con frecuencia: las panaderías se convierten en
consultorías tecnológicas, las mercerías en tiendas de complementos escandinavos... y
en cafés, librerías y galerías de arte, el barrio noctámbulo y rockanrollero por
excelencia ya no pasa el día durmiendo la resaca.
Por estos y otros motivos, hemos querido centrarnos en el barrio conocido por todos
como Malasaña y más concretamente en la Plaza 2 de Mayo, lugar que “por acuerdo
común” se convierte en el centro neurálgico del espacio público de la zona. En esta
mítica plaza, la bordadora Manuela Malasaña murió durante la revuelta napoleónica de
1808 camino a su taller, agredida por unos soldados franceses, según la leyenda. Como
llevaba unas tijeras encima, tuvieron la excusa perfecta para ejecutarla por apoyar la
sublevación. En la misma plaza del Dos de Mayo también podemos encontrar un
monumento a Daoiz y Velarde, dos oficiales de artillería del cuartel de Monteleón que
lucharon sin ayuda del ejército contra las tropas napoleónicas.
Ahora las tijeras como las que portaba Manuela, sólo se emplean con fines puramente
estéticos en las diversas y variadas peluquerías “cool” que podemos encontrar por el
barrio, y de la tradición costurera de la personaje apenas podemos encontrar alguna
mercería donde se venden trajes de verano hechos a medida y sombreros de “pijipis”
que se estilan en todas las terrazas. Terrazas que a partir del viernes se llenan desde las
diez de la mañana a pesar de las improntas vecinales y policiacas que intentaran poner
fin al botellón masivo que asolaba las calles del barrio.
4. 2
Pero Malasaña no es homogénea. No es sólo diversa en cuanto a nombres para se refiere
(Tribunal, Maravillas, Fuencarral, Malasaña…), sino que también lo es en cuanto a
aspecto y ambientes. Está el Malasaña apacible y tranquilo. Ése que se levanta cada
mañana fresco y limpio, en el que se oyen desperezarse las rejas de los comercios y en
el que gusta pasearse por sus calles estrechas y observar los antiguos edificios, ahora
rehabilitados con fachadas de colores que le dotan al barrio de distintas tonalidades. La
calle Ruiz, Velarde, Divino Pastor, La Palma, San Vicente Ferrer… todas ellas
alrededor de una plaza con historia sobre la cual gira nuestro estudio, la plaza del Dos
de Mayo, que se abre majestuosa con sus cervecerías, terrazas, puestos de discos y
libros antiguos. La tranquilidad que se respira en el barrio a esas horas no hace presagiar
lo que ocurre al anochecer, donde sale a relucir el pasado rebelde y revolucionario que
tuvo su máximo esplendor en la “revolución cultural” de los 80, y que hizo que
concentrara a muchos “garitos” y personas en busca de diversión tal y como lo hace hoy
en día, donde cada fin de semana gente de todas partes “toman” el barrio para
disfrutarlo hasta el último rincón.
5. 3
2. La ciudad y el espacio público.
Dos imágenes habrá que tener presentes para contar la historia reciente del barrio de
Universidad y la plaza Dos de Mayo –su espació público por excelencia–. La primera es
una imagen que nos regresa a principios del siglo pasado donde Hospicio y Universidad
eran parte de los barrios empobrecidos del Centro de Madrid. En aquellos años el
panorama urbano de esta zona era ruinoso, las condiciones higiénicas estaban lejos de
ser las adecuadas, la mortandad infantil era significativamente más alta que en el resto
de la ciudad y la gente del barrio eran más bien clase obrera y agrícola. (De la Cruz,
2012)
La segunda imagen, en parte alimentada por el pasado marginal del barrio, nos lleva a la
Malasaña de los 70 y 80, centro de la llamada “Movida Madrileña” que nos recuerda un
movimiento contracultural que impulsa con fuerza una serie de expresiones sociales,
políticas y artísticas ‘underground’-alternativas al espacio público: la música, el cine y
la literatura de La Movida, terminaron definiendo parte de lo que hoy encontramos en
Malasaña.
Teniendo estos dos referentes pensemos en términos de Borja que la historia de la
ciudad (y en este caso del barrio Universidad) es la historia de su espacio público, por lo
que en cierta medida encontraremos la materialización del pasado en el presente: “Las
relaciones entre los habitantes y entre el poder y la ciudadanía se materializan, se
expresan en la conformación de las calles, las plazas, los parques, los lugares de
encuentro ciudadano, en los monumentos.” (Borja y Muxi: 2000, 8), o bien como diría
Jesús Leal (1997) de manera sencilla: el espacio público es parte de “la representación
espacial de las relaciones sociales”. En este sentido entenderemos que el espacio
público es algo sumamente relativo, es el depositario material de las sociedades pasadas,
de las circunstancias, estructuras y conflictos pasados, si bien es estable en el tiempo,
ello de ningún modo quiere decir que sea inmutable, cambia y deja rastros de la historia
social vivida. No siempre es el mismo y no siempre se experimenta igual, es pues el
reflejo de la interacción entre sociedad y espacio material.
El espacio público de Malasaña de hoy, conserva aquellos restos de su pasado pobre y
de su pasado alternativo, pero no como un referente ajeno y extraño encerrado en la
historia, es por el contrario un espacio vivo que refleja las virtudes y los defectos de un
6. 4
barrio ecléctico; un espacio que lejos de instalarse en el pasado se reconstruye
constantemente como físico, simbólico y político. De su pasado pobre quedan viviendas
y personas que se han quedado rezagadas por el siglo; viviendas en malas condiciones
que no han llegado a ser tocadas por la modernización de la zona y que han sido
ocupadas por una población inmigrante pobre que a pesar de tener una presencia
importante en el barrio, no aparece necesariamente en el espacio público para
apoderarse de él; personas, viejos y sobre todo viejas, que se han quedado solos y solas
en sus pisos sin tener en realidad un contacto dinámico con el espacio público. Es por
ello que existen ciertas pautas sutiles que nos deben indicar que el pasado pobre de
Malasaña aún no ha desaparecido.
En contraposición, encontramos otra Malasaña que ha sufrido una renovación particular
de su pasado alternativo y rebelde, pues se han efectuado renovaciones en la vivienda y
en los patrones de consumo, hechas por personas nuevas con mayor escolaridad y con
mejores condiciones económicas que demandan ciertas cosas del barrio y de su espacio
público que no necesariamente le han sido propias. Nacionales e inmigrantes con
mejores rentas llegan a Malasaña conociendo su pasado bohemio, queriendo vivir en
aquel barrio mítico donde se dieron unas especiales circunstancias para que florecieran
tendencias políticas y culturales progresistas. No obstante, no es ‘gente de barrio’ y en
muchas ocasiones son personas que se encuentran por temporadas cortas pero que
efectivamente ‘viven ahí’, aunque también muchos de ellos han llegado para quedarse y
reconfigurar una nueva Malasaña de moda y de noche. Ello nos indica que las
conquistas de esta nueva población han implicado un rompimiento: “el espacio público
de la calle nunca ha sido pre-otorgado [...] ha sido siempre el resultado de una demanda
social, negociación y conquista... los espacios públicos tienen que adaptarse a diferentes
públicos...” (Lees, 1998). Es cierto pues que ciertas características son determinantes en
este proceso que ha concentrado clases medias y altas donde antes sólo habían clases
obreras o populares: “Considerando a la población, también podemos establecer
distintos submercados formados por demandantes de distintas características, en
relación con la edad, los ingresos y el origen” (Leal, 2002: 61).
En este juego de fuerzas del pasado y del presente, la plaza Dos de Mayo parece
encontrarse en medio. Teniendo al espacio público como un derecho ciudadano de
primer orden, y que en función de la igualdad de apropiación de él por distintos
7. 5
colectivos sociales, culturales, de género y edad (Borja y Muxi, 2000) se garantiza el
derecho y la tolerancia de cualquier persona a hacerse cargo y de vivirlo a su modo,
comenzaremos a observar que la Dos de Mayo es una plaza única en su tipo, pues la
vivencia y la apropiación que hacen de ella distintas personas y colectivos refleja que la
plaza es un lugar abierto a la convivencia y a la actividad, no es una plaza exclusiva que
se reduzca a una parte estética ni comercial del barrio, es por el contrario la parte más
viva y significativa de él. Por ello pensamos que a pesar de las dificultades que supone
el proceso de gentrificación que ocurre en la zona, la Dos de Mayo habla, al menos
todavía, de un lugar tolerante y respetuoso a la diferencia, un espacio público dispuesto
a integrar distintas personas. Quizá la prueba más elocuente de ello es que parte de la
identidad del barrio se concentra en la plaza, la Dos de Mayo es una referencia que se
presume: “el derecho a la centralidad accesible y simbólica, a sentirse orgullosos del
lugar en el que se vive y a ser reconocidos por los otros, a la visibilidad y a la identidad,
además el disponer de equipamientos y espacios públicos cercanos, es una condición de
ciudadanía” (Borja y Muxi, 2000: 15)
Frente a la imagen de una ciudad fragmentada que “tiene tendencia a ser una ciudad
físicamente despilfarradora, socialmente segregada, económicamente poco productiva,
culturalmente miserable y políticamente ingobernable (…) que en la práctica niega el
potencial de las libertades urbanas, la promesa de justicia y los valores democráticos.”
(Borja y Muxi, 2000: 15). La Dos de Mayo y las personas que diariamente acuden a
ella, resisten y defienden en la práctica una visión de ciudad distinta, si bien no idílica y
libre de problemas, sí una experiencia de ciudad con un contenido social y ciudadano
distinto que intenta romper con la triple dialéctica negativa (disolución, fragmentación y
privatización) de la ciudad y el espacio público.
Si la agorafobia urbana es una enfermedad producida por la degradación o la
desaparición de los espacios públicos integradores y protectores a la vez que abiertos
para todos, creemos que la Dos de Mayo es un espacio publico de calidad que más bien
se enfrenta a la atomización de las relaciones sociales. En este sentido suscribimos con
Borja y Muxi que ello es un aspecto crucial que no debe ser desatendido pues es quizá
el principio y no el final de un cambio que refleje una sociedad más tolerante y
democrática, es un espacio en donde aparecen las respuestas positivas que deben ser
mantenidas por políticas públicas y por la gente de manera activa.
8. 6
“la ciudad aparece como el lugar de las oportunidades, de las iniciativas y de las
libertades individuales y colectivas. El lugar de la intimidad, pero también el de la
participación política. De la revuelta y del autogobierno. De la innovación y del cambio
(…) La ciudad es sobretodo, espacio público y no pareciera que los que allí vivimos, la
gran mayoría de la población, pudiéramos renunciar a ella sin perder vínculos sociales y
valores culturales, sin empobrecernos.” (Borja y Muxi, 2000: 15) La Dos de Mayo
reclama las calles y defiende sus valores.
9. 7
3. Aproximación sociodemográfica.
El barrio de Universidad es uno de los seis que componen el distrito Centro de Madrid,
antes de plantear las hipótesis que le dan sentido a este trabajo, es necesario construir
una imagen del barrio a partir de la comparación con Madrid y con el distrito Centro
que nos informe sobre algunas de sus características sociodemográficas básicas. En este
apartado daremos cuenta de varios elementos.1
Comenzaremos considerando que en la
distribución de sus respectivas pirámides poblacionales, tanto el distrito Centro como
internamente el barrio Universidad, tienen más personas agrupadas en edades medias y
adultas (esto es, de 25 a 45 años), mientras que la Ciudad de Madrid tiene distribuida su
población de manera más equitativa en todas las edades, teniendo un mayor porcentaje
en edades más bajas (de 0 a 20 años). A pesar de que la distribución por sexos es
relativamente equitativa (aunque ligeramente superior en mujeres las distintas franjas de
edad) en Universidad se aprecia un desfase en las mujeres de edades que van de los 60
años en adelante pues su porcentaje es superior al de los hombres de forma notable.
Fijándonos en la distribución de inmigrantes entre las tres poblaciones comparadas
(Madrid, distrito Centro y barrio Universidad), podemos observar que hay diferencias
significativas en cuanto al país de procedencia de los inmigrantes. Así, vemos que en
Madrid, los países de procedencia de los inmigrantes que tienen mayor presencia son
Rumanía y Ecuador (con diferencia de los restantes países) seguidos de China, y
diferentes países latinoamericanos como Perú o Bolivia; mientras que respecto al
distrito Centro los extranjeros que tienen mayor porcentaje son los procedentes de
Bangladesh, Italia, China o Filipinas; algo que difiere en gran medida de la ciudad de
Madrid. Sin embargo, como es de esperar, esta distribución del distrito Centro no
cambia mucho de la del barrio Universidad, ya que Filipinas, China e Italia son los
países con mayor porcentaje. Con una excepción, los ciudadanos procedentes de
Bangladesh, que apenas son significativos en el barrio Universidad, se agrupan
principalmente en el barrio de Embajadores y no se distribuyen equitativamente por
todo el distrito Centro.
1
Para la descripción que sigue véase gráficas detalladas en 7. Anexos.
10. 8
En términos de la distribución por nivel de estudios, podemos encontrar cómo a pesar
de qué no existen diferencias enormes en los datos, si qué podemos encontrar
divergencias significativas. Así, por ejemplo, podemos observar que generalmente
existe un mayor nivel de estudios tanto en el distrito Centro como en el barrio
Universidad respecto a la totalidad de la ciudad de Madrid, especialmente en los niveles
de diplomatura, licenciatura o doctorado. No obstante, en cuanto a las diferencias entre
el distrito Centro y el barrio Universidad, a pesar de que los porcentajes de la
distribución del nivel de estudios no varían mucho, el barrio Universidad posee unos
mayores porcentajes de los niveles más altos de estudios.
Ahora bien, si nos detenemos ahora a analizar la renta disponible bruta per cápita (en
euros) en la ciudad de Madrid y el distrito Centro desde 2002 al 2009, podemos
observar que ha existido un aumento progresivo y paulatino de esta renta, siempre
permaneciendo por encima la renta del distrito Centro respecto a la de la ciudad de
Madrid. Sería interesante contar con datos más recientes desde 2009, ya que podríamos
ver los efectos de la crisis económica y una disminución de la renta disponible de los
ciudadanos, así como conocer concretamente la renta disponible del barrio Universidad
para ver si difieren de los datos del distrito Centro, lamentablemente estos datos por el
momento no están disponibles. En cuanto al precio de la vivienda (en euros/metro
cuadrado), podemos observar una generalización de la bajada del precio de ésta debido
a la crisis inmobiliaria tanto en la ciudad de Madrid como en el distrito Centro y en el
barrio Universidad. A pesar de que existe esta tendencia generalizada en las tres zonas
en la bajada del precio, sí que podemos ver diferencias entre ellas, ya que el distrito
Centro es más caro que el barrio Universidad y más aún que el precio de la ciudad de
Madrid.
Falta hacer las consideraciones respecto de la vivienda. Por régimen de tenencia tanto el
distrito Centro como el barrio Universidad tienen cifras similares en cuanto al régimen
de alquiler (35% aprox.) en comparación con la ciudad de Madrid, que tan sólo tiene un
16,5% de viviendas en alquiler, lo que nos hace pensar la particularidad de nuestro
distrito y barrio a estudiar, pues es zona con alto nivel de alquiler. En consecuencia a
esto, también vemos cómo en Madrid hay un gran porcentaje de viviendas pagadas (un
52%) en comparación con el Centro y Universidad, con sólo un 36% aproximadamente.
Respecto a la distribución del estado de la vivienda, aunque la mayoría de las viviendas
11. 9
se encuentran en buen estado, sí que apreciamos diferencias entre las diferentes zonas.
En el distrito Centro, existe mayor porcentaje de viviendas en estado deficiente (un 20%
aproximadamente) y consecuentemente, un menor porcentaje de viviendas en buen
estado (70%). Por otro lado, la ciudad de Madrid en su totalidad tiene una amplía
mayoría de viviendas en buen estado (90%), mientras que este porcentaje varía
significativamente en el distrito Universidad, con un 80% aproximadamente de
viviendas en buen estado y un 20% de viviendas en estado deficiente o malo, lo que nos
indica que en nuestro barrio existen problemas de infravivienda superiores al promedio.
De los tipos de viviendas que existen en las tres poblaciones que estamos comparando,
podemos decir que las tres en su mayoría poseen viviendas principales, pero es Madrid
la que tiene mayor porcentaje (78%) respecto a las otras (60% aproximadamente tanto
para Centro como Universidad). Otra diferencia considerable con Madrid es que existe
una importante suma de viviendas desocupadas tanto en el distrito Centro como en el
barrio Universidad, que llegan a un cuarto del total de las viviendas aproximadamente.
Finalmente, en las superficies útiles de las viviendas que hay tanto en Madrid, Centro y
Universidad, las diferencia más significativa que podemos apreciar es que en general,
las viviendas de la totalidad de la ciudad de Madrid disponen de más metros cuadrados
de superficie útil que las del Centro o Universidad, pues la mayoría de las viviendas
(alrededor del 40%) se sitúan entre 30 y 60 metros cuadrados, lo que también nos estaría
dando indicaciones de posibles problemas de infravivienda.
12. 10
4. Análisis del espacio público.
Las hipótesis de trabajo que hemos planteado en función de lo anterior, y que a
continuación analizaremos son las siguientes:
!
1. Los principales colectivos que hacen uso de la plaza son edades primeras (0-18)
niños y jóvenes; edades intermedias (19-45) padres de familia.
2. El uso que se hace de la plaza es principalmente lúdico y de recreación, aunque
cambia el tipo de recreación según la hora del día.
3. La Dos de Mayo se presta particularmente para la interacción entre cualquier
tipo de personas debido a que la utilizan diversos colectivos, lo que genera un
ambiente respetuoso y abierto.
4. La vida de la plaza y las relaciones interpersonales que se experimentan en ella
se concentran los fines de semana por la tarde y la noche.
5. La estructura física redondeada de la plaza condiciona e invita a la interacción
entre los diversos individuos y grupos.
6. Debido a que la plaza está rodeada por edificios de cuatro o cinco pisos, se
encuentra bien vigilada y en consecuencia es muy segura.
El objetivo que se encuentra tras las hipótesis consiste en determinar algunos factores,
aunque sean modestos e incompletos, que puedan darnos pistas para considerar si la
plaza es o no un espacio público de calidad, ello intentamos lograrlo a partir de observar
tres aspectos diferentes, a saber: (1) los usos que se le dan a la plaza, (2) los colectivos
que aparecen, y (3) su diseño físico. Para cumplir tales objetivos hemos recurrido a dos
estrategias metodológicas distintas, la observación participante y la etnografía. Con la
observación participante tratamos de utilizar la plaza y convivir con distintas personas
de maneras diversas; con la etnografía realizamos registros cuantitativos y cualitativos
de nuestras visitas. En lo que sigue analizaremos los datos obtenidos en función de tres
tablas de datos y nuestros diarios de campo que recuperan de forma sintética los frutos
de nuestras observaciones.
Hipótesis 1. Como se observa en los registros recogidos por la Tabla 3, efectivamente
tanto a lo largo del día, como entre semana y fines de semana –es decir el uso genérico
de la– se concentra en lo que hemos denominado como EP (edades primeras) y EI
(edades intermedias). Ello nos sugiere que las personas de EA (edades avanzadas) a
pesar de tener presencia demográficamente importante en el barrio, incluso mayor que
13. TABLA DE OBSERVACIÓN FINES DE
SEMANA
POBLACIÓN EN LA PLAZA (%)
VARON MUJER TOTAL
ESPAÑOLA 36 31 67
EXTRANJERA 18 15 33
TOTAL 54 46 100
RELACIONES GRUPALES EN EL ESPACIO (%)
ENTRE ESPAÑOLES ENTRE
EXTRANJEROS
MIXTO TOTAL
56 26 18 100
TAMAÑO DE LOS GRUPOS (absolutos)
1 PERS. DE 2 A 3 DE 3 A 5 MAS DE 5 TOTAL
ESPAÑOL 12 32 11 5 124
EXTRANJERO 5 11 1 2 46
TIEMPO DE PERMANENCIA EN LA PLAZA (minutos aprox.)
VARON MUJER
ESPAÑOL 35 28
EXTRANJERO 48 31
Tabla 1. Fuente: elaboración propia.
14. TABLA DE OBSERVACIÓN DÍAS ENTRE
SEMANA
POBLACIÓN EN LA PLAZA (%)
VARON MUJER TOTAL
ESPAÑOLA 38 22 60
EXTRANJERA 26 14 40
TOTAL 64 36 100
RELACIONES GRUPALES EN EL ESPACIO (%)
ENTRE ESPAÑOLES ENTRE
EXTRANJEROS
MIXTO TOTAL
58 30 12 100
TAMAÑO DE LOS GRUPOS (absolutos)
1 PERS. DE 2 A 3 DE 3 A 5 MAS DE 5 TOTAL
ESPAÑOL 7 12 6 - 66
EXTRANJERO 5 7 4 1 42
TIEMPO DE PERMANENCIA EN LA PLAZA (minutos aprox.)
VARON MUJER
ESPAÑOL 28 25
EXTRANJERO 40 28
Tabla 2. Fuente: elaboración propia.
15. TABLA DE OBSERVACIÓN PERSONAS POR TIPO DE ACTIVIDAD
(absolutos)
MAÑANA TARDE NOCHE
Entre semana Fines de semana Entre semana Fines de semana Entre semana Fines de semana
EP EI EA EP EI EA EP EI EA EP EI EA EP EI EA EP EI EA
LÚDICA
2 4 0 4 2 0 4 1 0 8 4 1 6 2 0 22 13 1
CONSUMO
2 5 1 2 6 2 1 5 2 1 14 3 3 11 2 6 24 4
PASEO
23 11 4 6 4 2 4 3 0 7 14 2 4 8 0 8 12 0
Tabla 3. Fuente: Elaboración propia.
!
!
EP= EDADES PRIMERAS (0-18)
EI= EDADES INTERMEDIAS (19-45)
EA= EDADES AVANZADAS (46 EN ADELANTE)
16. 11
las EP, no aparecen de forma relevante en el espacio público. No obstante hemos de
mencionar que esta observación debe ser matizada, pues la presencia de una escuela
contribuye de forma determinante a la aparición de las EP de forma regular en la plaza.
Hipótesis 2. Como también se observa en la tabla 3, la observación no necesariamente
corrobora la hipótesis pues en nuestra tipología de usos de la plaza (lúdica, consumo,
paseo) en realidad los usos no presentan un patrón claro. Contrario a lo que inicialmente
esperábamos, la plaza se utiliza en una medida importante, para ir a jugar con los niños
en los distintos parques y para sacar a pasear a los perros, por las mañanas entre semana
y por las tardes de los fines de semana, buena parte de la actividad se concentra en lo
que denominamos ‘paseo’. Ahora bien, la plaza al estar rodeada por comercios y
terrazas mantiene una actividad de ‘consumo’ a lo largo de la semana pero que como es
de esperarse se concentra en las noches de los fines de semana. La utilización lúdica en
realidad aparece en dos momentos distintos, por las tardes cuando niños juegan futbol al
salir del cole, y los fines de semana cuando se queda en la plaza para hacer botellón.
Además de lo anterior es importante mencionar que la plaza sirve como centro de
reunión y de paso, cuestión que no hemos logrado contabilizar debido a la fugacidad de
los eventos, pero creemos importante hacer mención de ello2
.
Hipótesis 3. Para el análisis de esta hipótesis debemos realizar una valoración basada en
las tablas 1 y 2, además de nuestras percepciones revisadas en los diarios de campo. Si
observamos con atención las tablas aparecerá que al menos en términos de género y
nacionalidad, es medianamente claro que diversos colectivos participan en vida de la
plaza, aunque no necesariamente interactúan entre ellos, sin embargo ello tampoco
implica una separación que pueda ser explicada por el propio espacio público. No
obstante la interacción entre diversos grupos (mujeres-hombres, y nacionales-
extranjeros) aumenta un poco los fines de semana. Un aspecto relativamente atractivo es
que la población inmigrante que aparece en la plaza permanece por lapsos de tiempo
incluso mayores que los nacionales (sobre todo los varones) en las bancas circulares del
centro de la plaza. Pensamos que nuestras observaciones corroboran que en la plaza
existe un ambiente respetuoso y abierto entre sus ocupantes, pues conviven sin
problemas aparentes distintas personas y grupos realizando actividades diferentes.
2
Para ésta y otras hipótesis véase mapa de referencia en 7. Anexos
17. 12
Desafortunadamente los inmigrantes o grupos de inmigrantes no pueden ser
identificados por la mera observación, la población de filipinos que resulta ser el grupo
inmigrante más numeroso en el barrio, no aparece en la plaza de manera representativa
y acorde a su número. No es posible determinar si ello también es posible explicarlo por
las relaciones dentro de la propia plaza o se debe a otros factores.
Hipótesis 4. Quizá ésta sea la única hipótesis que se corrobora a cabalidad, pues a pesar
de que como hemos visto, existen una serie de actividades que se realizan a lo largo de
la semana con una intensidad diferencial, es claro que la Dos de Mayo destaca por su
vida los fines de semana por las tardes y por las noches, los grupos que aparecen
aumentan en números absolutos de manera relevante, así como que las distintas
actividades se potencian, no obstante nuevamente el colectivo de las EA, se mantiene
rezagado, quizá por la propia naturaleza de las actividades que se realizan en la plaza,
quizá por factores desconocidos que los desincentivan a salir.
Hipótesis 5. Pensamos que esta es una hipótesis que debe ser comparada con otras
plazas o reformulada para que muestre su utilidad, pues resulta complicado definir
‘invita a la interacción’. Sin embargo, podemos mencionar que si bien el propio espacio
por sí mismo no necesariamente fomenta la interacción, pues creemos que depende de
muchos otros factores simbólicos y sociales, al menos no la restringe, es decir, la
posibilidad de sentarse en amplios bancos redondeados contribuye a acercar a las
personas y a crear situaciones en posibles que de otra manera limitarían la interacción
social, como por ejemplo con bancos individuales separados por amplios espacios. Por
otra parte, es posible considerar más que la propia estructura de los bancos, la
distribución de la plaza entre parques y comercios, mantiene constante un flujo de
personas que igualmente crean situaciones en las que es posible conocer gente, en los
tres tipos de actividades observadas (lúdico, consumo, paseo).
Hipótesis 6. Esta es una hipótesis que consideramos difícil de probar no obstante
interesante, en la medida en que la seguridad en los espacios públicos es un signo claro
de calidad en ellos. A pesar de que en nuestras observaciones nos encontramos
recurrentemente con un grupo de toxicómanos que se reunían en una banca del centro
de la plaza, y a pesar de que no es raro ver a personas consumiendo drogas (porros), lo
que para algunas personas podría significar algún factor de inseguridad, la plaza Dos de
18. 13
Mayo aparece bastante segura. La presencia policiaca que se encuentra haciendo
rondines constantes durante las noches de los fines de semana (sumamente ritualizados),
en realidad sirve más como disuasión para evitar el consumo de alcohol en la vía
pública, pues no se percibe un clima de inseguridad incluso a altas horas de la noche. Lo
cierto es que al igual que en la hipótesis anterior, a pesar de que no podemos probar
concluyentemente que la altura de los edificios sea el factor que pueda explicar la
seguridad en la plaza, creemos que si ocurriera algún evento sería fácilmente observable
desde distintos puntos lo que al menos facilita si bien no determina la seguridad en la
plaza.
19. 14
5. Conclusiones.
En vista que este ha sido un trabajo al que nos hemos aproximado de una manera mucho
más exploratoria y tentativa, consideramos que no es posible ni prudente llegar a
conclusiones demasiado fuertes ni deterministas al respecto. A pesar de ello pensamos
que puede ser útil como una visión de entrada para profundizar en el tema. La
ambivalencia que ronda a Malasaña –las dos Malasañas– una cada vez más adecuada a
los requerimientos comerciales pero también de vivienda de clases medias y altas
educadas, frente a otra marginada y ausente de los espacios públicos, es difícil retratarla
a través de la plaza Dos de Mayo.
Si consideramos algunos elementos que se han ido mencionando al hilo del trabajo,
como las mujeres mayores, la población filipina, el elevado nivel de viviendas en mal
estado y de pequeño tamaño, podemos suponer que la plaza no acoge a estos colectivos
por alguna razón, ya sea por su condición, su estatus legal, su economía, o una
multiplicidad de factores que existen, que influyen en la desaparición de colectivos
marginados y que valdría la pena explicar, pero que no son directamente observables en
la plaza, por lo que supera las limitaciones de un trabajo como éste.
No obstante lo anterior, creemos que es posible comenzar a entrever algunos elementos
rescatables y que deben ser valorados de una plaza tan heterogénea y múltiple como la
Dos de Mayo. Consideramos que la interacción entre diversos grupos de edades, de
distintos sexos, de distintas nacionalidades, realizando también distintas actividades, en
un clima de respeto habla de un espacio público de calidad, un espacio público libre y
en cierto sentido un espacio público democrático, pues a pesar la desaparición de los
colectivos mencionados no encontramos razones suficientes referentes a la propia plaza
que en sí mismos limiten de una forma estructural el uso y la apropiación del espacio
público. La distribución de parques infantiles y de mayores, la multiplicidad de
comercios para una variedad de bolsillos, y la arquitectura física de la plaza, de entrada
no parece limitar sino todo lo contrario.
Ello no quiere significar una invitación a la ingenuidad, efectivamente en Malasaña
existen cada vez más comercios y lugares de consumo especializados para públicos
20. 15
selectos, en detrimento de los típicos comercios necesarios para el funcionamiento
regular del barrio, los precios de la vivienda, a pesar de haberse desinflado con la crisis,
siguen siendo caros en comparación con el resto de Madrid, aunque siguen existiendo
infraviviendas relativamente escondidas sin tratar. Estas minúsculas indicaciones lo
único que pretenden referir es que los espacios públicos que se ven amenazados por esta
clase de procesos de tendencia agorafóbica, sólo pueden ser reclamados por una acción
cívica y política activa, que no hay razones para presumir que la libertad que goza la
Dos de Mayo no se vea afectada si no se defiende. Hasta ahora sigue siendo posible.
21. 16
6. Bibliografía.
Borja, J y Zaida Muxi (2000) El espacio público, ciudad y ciudadanía, Barcelona.
De la Cruz, L. (2010) “Dos de mayo, la plaza”, en Somos Malasaña en línea
www.somosmalasaña.com , consultado el 15 de mayo de 2013.
Lees, L. (1998) En Images of the Street. Planning, Identity and Control in Public Space.
Nicolas R. Fyfe (ed) Routledge, London and New York.
Leal, J. (2002). “Segregación social y mercados de vivienda en las grandes
ciudades”, Revista Española de Sociología, 2: 59-75.
Leal, J. (1997): "Sociología del espacio: el orden espacial de las relaciones
sociales", Política y Sociedad, 25, pp. 21-36
25. !
Fuente: Elaboración propia a partir de datos Munimadrid 01/01/12
0 a 4 5 a 9
10 a
14
15 a
19
20 a
24
25 a
29
30 a
34
35 a
39
40 a
44
45 a
49
50 a
54
55 a
59
60 a
64
65 a
69
70 a
74
75 a
79
80 a
84
85 a
89
90 a
94
95 a
99
100 y
más
Ciudad de Madrid 5.0% 4.5% 4.1% 4.1% 4.9% 6.9% 8.6% 9.0% 8.3% 7.8% 6.8% 5.5% 5.1% 4.8% 4.0% 4.3% 3.4% 2.0% 0.8% 0.2% 0.0%
Centro 3.6% 2.7% 2.4% 2.6% 4.3% 9.3% 12.8% 11.7% 9.5% 8.1% 6.9% 5.5% 4.5% 3.8% 3.0% 3.1% 3.0% 2.0% 0.9% 0.3% 0.0%
Universidad 3.8% 2.6% 2.4% 2.6% 4.2% 9.6% 12.5% 11.7% 9.1% 7.9% 7.0% 5.8% 4.7% 3.7% 3.0% 3.1% 3.1% 2.0% 1.0% 0.3% 0.0%
0.0%
2.0%
4.0%
6.0%
8.0%
10.0%
12.0%
14.0%
Población por grupos quinquenales
26. !
Fuente: Elaboración propia a partir de datos Munimadrid 01/01/12
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Fuente: Elaboración propia a partir de datos Munimadrid 01/01/12
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-10.0% -8.0% -6.0% -4.0% -2.0% 0.0% 2.0% 4.0% 6.0% 8.0% 10.0% 12.0%
0 a 4
5 a 9
10 a 14
15 a 19
20 a 24
25 a 29
30 a 34
35 a 39
40 a 44
45 a 49
50 a 54
55 a 59
60 a 64
65 a 69
70 a 74
75 a 79
80 a 84
85 a 89
90 a 94
95 a 99
100 y más
Pirámide poblacional Madrid
Hombres
Mujeres
-15.0% -10.0% -5.0% 0.0% 5.0% 10.0% 15.0% 20.0%
0 a 4
5 a 9
10 a 14
15 a 19
20 a 24
25 a 29
30 a 34
35 a 39
40 a 44
45 a 49
50 a 54
55 a 59
60 a 64
65 a 69
70 a 74
75 a 79
80 a 84
85 a 89
90 a 94
95 a 99
100 y más
Pirámide poblacional Centro
Hombres
Mujeres
27. !!!!!!!!!!!! !
Fuente: Elaboración propia a partir de datos del Censo 2001.
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Fuente: Elaboración propia a partir datos de Munimadrid Enero 2013
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-6% -4% -2% 0% 2% 4% 6% 8%
0 - 4
5 - 9
10 - 14
15 - 19
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40 - 44
45 - 49
50 - 54
55 - 59
60 - 64
65 - 69
70 - 74
75 - 79
80 - 84
85 - 89
90 - 94
95 - 99
100 y más
Pirámide poblacional Universidad
Hombres
Mujeres
85.5%
76.1% 76.9%
14.5%
23.9% 23.1%
Madrid Centro Universidad
Distribución españoles/extranjeros
Españoles Extranjeros
28. !
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Fuente: Elaboración propia a partir datos de Munimadrid Enero 2013
0.0%!
2.0%!
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6.0%!
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10.0%!
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14.0%!
Distribución de inmigrantes en Madrid
29. !
Fuente: Elaboración propia a partir datos de Munimadrid Enero 2013
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0.0%
2.0%
4.0%
6.0%
8.0%
10.0%
12.0%
Distribución inmigrantes Centro
30. !
Fuente: Elaboración propia a partir datos de Munimadrid Enero 2013
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0.0%
2.0%
4.0%
6.0%
8.0%
10.0%
12.0%
Distribución inmigrantes Universidad
31. !
Fuente: Elaboración propia a partir de Censo de población 2001.
Analfabetos Sin estudios Primer grado
ESO, EGB y
Bachillerato
Elemental
Bachillerato
Superior
FP Grado
Medio
FP Grado
Superior
Diplomatura Licenciatura Doctorado
MADRID 1.7% 10.3% 17.2% 21.8% 16.0% 3.9% 4.6% 9.0% 14.1% 1.3%
CENTRO 1.3% 9.0% 17.4% 20.7% 16.5% 3.3% 3.9% 9.1% 16.8% 1.9%
UNIVERSIDAD 1.1% 7.7% 16.4% 20.6% 17.6% 3.2% 4.0% 9.5% 17.9% 2.0%
0.0%
5.0%
10.0%
15.0%
20.0%
25.0%
Distribución por nivel de estudios
32. !
Fuente: Elaboración propia con datos de la Contabilidad Municipal de la Ciudad de Madrid Base 2002 Serie 2002-2009
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! ! Fuente: Elaboración propia con datos de Munimadrid 2013
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2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009
Madrid 16,292 17,133 18,122 19,149 20,660 21,374 22,039 22,279
Centro 17,472 17,810 18,282 19,690 21,408 22,010 22,546 22,663
0
5,000
10,000
15,000
20,000
25,000
Renta disponible bruta per cápita (euros)
0
500
1000
1500
2000
2500
3000
3500
4000
4500
2009 2010 2011 2012
Precio de la vivienda (€/m2)
Madrid!
Centro!
Universidad!
33. !
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Fuente: Elaboración propia a partir del Censo de viviendas 2001!
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! !Fuente: Elaboración propia a partir del Censo de viviendas 2001
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Totalmente
pagada
En pagos
pendientes
Por herencia
o donación
En alquiler
Otro hogar,
la empresa
Otra forma
Madrid 52.0% 23.7% 2.8% 16.5% 2.2% 2.7%
Centro 36.2% 19.5% 3.4% 36.0% 2.3% 2.6%
Universidad 37.0% 19.8% 3.5% 35.1% 2.2% 2.3%
0.0%
10.0%
20.0%
30.0%
40.0%
50.0%
60.0%
Distribución de viviendas por régimen de tenencia
0.0%
10.0%
20.0%
30.0%
40.0%
50.0%
60.0%
70.0%
80.0%
90.0%
100.0%
Ruinoso Malo Deficiente Bueno
Distribución por estado de la vivienda
Madrid
Centro
Universidad
34. !
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! !Fuente: Elaboración propia a partir del Censo de viviendas 2001
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Madrid Centro Universidad
Viviendas familiares convencionales 2,923,626 123,725 29,112
Alojamientos 215 0 0
Viviendas colectivas (total) 14,882 1,255 478
Hoteles, pensiones, albergues 1,590 87 54
Colegios mayores, residencias de
estudiantes 419 32 8
Residencias de trabajadores 89 0 0
Internados, academias y militares 636 79 24
Hospitales de larga estancias 134 9 0
Residencias de ancianos 628 84 75
Instituciones para personas con
discapacidad 5,033 326 175
Albergues para marginados sociales 217 67 19
Otras 132 19 6
Instituciones religiosas 1,424 62 0
Establecimientos militares 3,070 199 45
Instituciones penitenciarias 928 143 18
! ! ! ! ! ! ! !!!!!!!!!!!!Fuente: Munimadrid 2013
!!
Principal Secundaria Desocupada
Madrid 78.3% 7.7% 12.9%
Centro 61.9% 12.2% 23.8%
Universidad 59.6% 11.8% 26.0%
0.0%
10.0%
20.0%
30.0%
40.0%
50.0%
60.0%
70.0%
80.0%
90.0%
Tipos de vivienda
35. !
Fuente: Elaboración propia a partir del Censo de viviendas 2001
Hasta 29 m2 30 - 45 m2 46 - 60 m2 61 - 75 m2 76 - 90 m2 91 - 105 m2 106 - 120 m2 121 - 150 m2 151 - 180 m2
Más de 180
m2
Madrid 1.2% 9.1% 21.5% 22.1% 20.9% 11.4% 5.3% 4.1% 1.8% 2.6%
Centro 7.3% 21.6% 20.0% 14.5% 13.6% 8.8% 5.0% 4.5% 2.1% 2.7%
Universidad 6.7% 21.5% 19.7% 14.3% 14.0% 9.7% 5.2% 5.0% 2.1% 1.8%
0.0%
5.0%
10.0%
15.0%
20.0%
25.0%
Viviendas familiares principales por distritos y barrios según superficie útil