El autor describe cómo le gusta escribir a lápiz porque le permite dibujar las líneas con intensidad y siente que el árbol del que proviene la madera sigue creciendo a través de las palabras. También menciona un antiguo cuento mediterráneo. Explica que cuando todos sus símbolos caben en su círculo blanco de verdades, alcanza la perfección y la paz interior. Finalmente, habla sobre cómo a menudo los recuerdos rígidos lo alejan de sí mismo y de los demás, y cómo hoy esc

1. Francesc Picas

2. A Ultramar

3. PODA FRUCTÍFERA No solamente me gusta escribir a lápiz porque así la línea permite ser dibujada en función de la intensidad que le doy a la palabra, sino porque la envoltura de madera de la mina hace que crea que el árbol al que perteneció esta madera que aprieto sigue creciendo a través de las palabras, como una rama viva aún ... Esto, creo, que ya lo relataba un antiguo cuento mediterráneo que un día de éstos, si lo encuentro, os transcribiré.

4. APUNTANDO AL SER Cuando dentro de tu círculo blanco de las verdades todos, ¡todos!, tus símbolos tienen cabida, tienes la perfección más al alcance, y un nuevo símbolo que te define la paz interior te dice, más que quien eres, que, plenamente, eres .

5. Con todo , A mor, me sirves más y más a mor en vasos de flores.

6. Y ésta..., ¡ésta es mi mejor obra de autoría compartida! ¡Feliz Corversario, Sangre!, ahora que, des de aquí, entre nosotros, siempre nos quedará... más luz.

7. DUREZA A menudo, sin embargo, la costra impermeable de los recuerdos, es la que más me aleja de ti y, por tanto, de mí mismo.

8. Hoy, entre manos, a mano no tengo nada, ni las manos, porque éstas, amantes, se tienen en demasía a sí mismas y me excluyen. Hoy te escribo con la mirada.

9. El aliento se puede ofrecer de todas las formas imaginables.

10. ¿Plenitud? Cuando la geografía líquida que somos transparenta todo aquello que nos envuelve, construyendo el instante.

11. “ A Ultramar” Autor: Francesc Picas Fotografía: Francesc Picas Elaborado por: Olivia