Francisco Oller fue el primer pintor hispanohablante en seguir el impresionismo. Nacido en Puerto Rico en 1833, estudió arte en España y Francia donde conoció a maestros del impresionismo. Creó cientos de pinturas a lo largo de su vida, incluyendo paisajes y retratos impresionistas así como obras que criticaban las realidades de Puerto Rico como su famosa pintura "El Velorio" de 1894. Se le considera el mejor pintor puertorriqueño del siglo XIX.

1. Francisco Oller Idelisa L. Avilés Hidalgo

2. Primer pintor de habla hispana en seguir el impresionismo. Educador puertorriqueño: En 1868 inaugura en la capital una academia gratuita de dibujo y pintura. En 1889 funda una escuela de dibujo y pintura para señoritas. En 1902 nombrado profesor de dibujo en la Escuela Normal (más tarde Universidad Nacional).

4. Hacienda Aurora, 1898 Se le ha considerado el mejor pintor puertorriqueño del siglo XIX. Nació en Bayamón, Puerto Rico en 1833. Miembro de una familia distinguida de San Juan. Desde pequeño sintió gran amor por el dibujo.

5. Vista en el Camino

6. Oller se educó en algunas de las escuelas de arte más sobresalientes de España y Francia, donde fue compañero de algunos maestros del impresionismo francés. La obra de Oller consta de cientos de piezas elaboradas a lo largo de 70 años. De sus largas etapas en Francia y España hay pinturas típicamente impresionistas; por ejemplo algunos paisajes que parecen capturar la naturaleza viva, en movimiento. Barcos del Sena, 1875

7. Paisaje Francés I

8. Bocetos para El Velorio

9. En cambio en otras de sus obras, especialmente las pinturas durante su estancia en Puerto Rico, se alejan del impresionismo para representar críticamente las duras realidades del país. De este género es El VELORIO en 1894

10. Su pintura ELVelorio (1894), de cuatro por seis pies aproximadamente, presenta la mezcla del luto y las festividades que solían seguir la muerte de un jíbaro. Se trata de una visión de la sociedad puertorriqueña que provocó muchas críticas por su contenido. Primero fue exhibido en La Habana, y más adelante en París. Finalmente se convirtió en propiedad de Federico Degetau quien lo legó a Universidad de Puerto Rico, donde ahora cuelga.

11. La Escuela del Maestro Rafael Cordero

12. En sus bodegones de frutas nativas, como sus guayabas y pajuiles capta la atmósfera del trópico y testimonia el Puerto Rico en el que vivió.

13. Plátanos y Guineos, 1893

14. Plátanos Amarillos

15. Entre sus obras destacan: El pleito de la Herencia (1854-5186) Retrato de Manuel Sicardó (1866-1868) El Molino (1875) Las Lavanderas (1887-1888) El Velorio (1893) Bodegón con Piñas (1912-1914) Murió en San Juan en el 1917. El Estudiante, 1874