El documento describe el galacho de Juslibol, un espacio natural situado cerca de Zaragoza. El galacho se formó después de una gran inundación del río Ebro en 1961 en un antiguo meandro abandonado. Actualmente, el área incluye el galacho, lagos formados por la extracción de grava, bosques ribereños, huertas cultivadas a lo largo del río, y acantilados de yeso que dominan el paisaje. La zona ha estado habitada durante siglos y ofrece un hábitat valioso para la fl
2. ¿QUÉ ES EL GALACHO?
• El galacho de Juslibol es un espacio de alto
valor paisajístico, ecológico y cultural situado
a unos 5 km., aguas arriba de Zaragoza, en la
margen izquierda del Ebro, entre los barrios
rurales de Alfocea, Juslibol y Monzalbarba.
6. LA ESTEPA
LOS ESCARPES DE
YESO
LAS HUERTAS
EL GALACHO
LAS HUERTAS
EL SOTO DE RIBERA
EL SOTO DE RIBERA
LOS LAGOS
EBRO
EL CASTILLO DE MIRANDA
7. 1.- El galacho
Palabra aragonesa que designa a un meandro
abandonado por el río. El de Juslibol se formó tras
la gran inundación del Ebro en 1961.
1927
1957
1961
Actualidad
8. La superficie de aguas libres disminuye año tras año. Ela antiguo cauce se
va cubriendo y es colonizado por la vegetación: primero carrizos y aneas
que, paulatinamente, serán sustituidos por el bosque de ribera. Para
evitarlo se han construido canales que permiten la entrada de agua de
forma artificial. Es el galacho más reciente formado por el Ebro y,
probablemente, el ultimo, al estar el río regulado por presas y encauzado
por obras de defensa.
9. 2.- Los lagos.
Las extracciones de gravas para la construcción en los años 70
dejaron un conjunto de lagos situados entre el antiguo cauce del río y
el actual. Con el tiempo y el crecimiento de la vegetación han pasado
de ser espacios degradados a tener gran calidad estética.
10. 3.- El soto o bosque de ribera.
Árboles y otras plantas colonizan las riberas según su resistencia a las
crecidas y sus necesidades de agua: sauces, álamos, chopos, fresnos y
olmos conviven con arbustos y lianas en una autentica selva enmarañada,
refugio excepcional para la fauna.
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12. 4.- El río Ebro.
El cercano Ebro, modelador con su dinámica de este paisaje, nos
muestra su ancho cauce, la fuerza de sus aguas, sus playas e islas y
sus frondosas riberas. Las crecidas periódicas inundan todo el espacio
y, junto a las aguas subterráneas, alimentan galacho y lagos.
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14. 5.- Las huertas.
La riqueza de estas tierras y el agua del río Gallego conducida por la red de
acequias, que adivinamos por sus cortinas de cañas, han sido aprovechadas
tradicionalmente para cultivar alfalfa, hortalizas, verduras, frutas y cereal.
Destaca la acequia del Rabal, que nos acompaña en el camino al Galacho.
15. 6.- El escarpe de yesos.
El yeso, principal componente, es una roca frágil. El río, junto al viento, la
lluvia y el hombre han esculpido estas paredes.
Aún podemos observar alguna cantera y los restos de algún horno de
explotación del yeso (ya abandonados)
Estas paredes cortan el paisaje en dos unidades muy contrastadas. Con más
de 40 metros de altura, desde él se dominan galacho y huertas.
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19. 7.- La estepa.
La zona superior del escarpe es una muestra singular de la
aridez de la Depresión Media del Ebro: un ambiente seco,
abierto, inmenso, lleno de luz, con un cromatismo, unas
adaptaciones vegetales y una fauna muy distintas de las de la
zona húmeda.
20. JUSLIBOL, TIERRA
HABITADA
• 8.- Un lugar secularmente habitado.
El habitat tradicional en cuevas -excavadas
en los yesos-, el castillo medieval de
Miranda o los restos del poblado ibero nos
hablan de otras referencias culturales que
conforman la secular presencia humana en
torno a tres barrios rurales que mantienen su
carácter tradicional cerca de lo urbano.