Jesús anuncia que el Reino de Dios está cerca y llama a Simón y Andrés a seguirlo, dejando sus redes atrás. La vocación implica dejar todo para sumergirse en la misión de Jesús de anunciar el amor de Dios. El Reino de Dios significa que Dios está cerca a través de Jesús, quien es amor. Los cristianos deben vivir amando a los demás y trabajando con Jesús para hacer realidad el deseo de Dios.