Este documento enfatiza la importancia de la santidad de vida para los cristianos y la Iglesia. La Iglesia debe ser una "Iglesia madre y educadora" cuyos miembros viven de acuerdo con los valores cristianos y son un ejemplo a través de sus buenas obras. La falta de santidad dificulta la labor apostólica y evangélica. Los cristianos, especialmente los padres, deben orar para perdonar sus defectos y ser instrumentos que atraigan a otros a Cristo a través de testimonios