Johannes Gutenberg inventó la imprenta en 1440, lo que revolucionó la producción de libros. Antes, los monjes tardaban hasta 10 años en copiar manuscritos a mano, mientras que Gutenberg desarrolló tipos móviles de metal y prensas de vino para imprimir páginas rápidamente. Su invento aceleró la difusión del conocimiento científico y el desarrollo de lenguas vernáculas, y dio origen a la industria moderna de publicaciones.