La relación campo-ciudad actual expresa la dominación de las ciudades sobre el campo en términos naturales, sociales, económicos y culturales. Las migraciones forzosas del campo a la ciudad, justificadas por la industrialización, canalizan a los campesinos expulsados a industrias que buscan mano de obra barata. El negocio de producción mundial de alimentos priva a campesinos en el Sur de recursos y genera migraciones masivas al Norte en búsqueda de una mejor vida.