La Revolución Francesa (1789-1799) transformó Francia de una monarquía absoluta a una república democrática. Fue causada por las malas condiciones económicas y el descontento con el rey Luis XVI. Pasó por etapas de violencia incluyendo la toma de la Bastilla, la ejecución del rey, y el periodo de terror de Robespierre. Terminó con Napoleón dando un golpe de estado en 1799.