La dictadura franquista en España entre 1939 y 1975 se basó en una ideología nacionalcatólica y tradicionalista que concentraba todo el poder en Franco. No había libertades políticas y el único partido permitido era el Movimiento Nacional. La economía inicialmente sufrió la autarquía y escasez pero luego se liberalizó y experimentó el desarrollismo. La sociedad estaba fuertemente controlada e influenciada por la Iglesia católica aunque hubo más apertura cultural hacia el final del régimen.