Clasificaciones, modalidades y tendencias de investigación educativa.
La crisis de la Restauración
1. La crisis del sistema de la
Restauración.
El reinado de
Alfonso XIII
Autor: José Carlos García
González. Prof. de la
Sección Bilingüe del Liceo
XVII de Poznan.
2. El regeneracionismo político.
• La primera etapa del reinado de Alfonso
XIII estuvo marcada por el espíritu
regeneracionista.
• Este momento coincidió con una
renovación dentro de los partidos
dinásticos tras la muerte de los
fundadores de ambos partidos, Cánovas
(1897) y Sagasta (1903):
– ANTONIO MAURA alcanzará la
jefatura en el Partido Conservador y
– JOSÉ CANALEJAS será el líder del
Partido Liberal.
• Comienzan así una serie de intentos de
reforma que pretenden hacer (en
palabras del propio Maura) una
“revolución desde arriba” para evitar la
“revolución desde abajo”. Retrato de Alfonso XIII
3. La descomposición del sistema político
de la Restauración.
• La clave del éxito del sistema político de la
Restauración tal y como lo había concebido
Cánovas era la estabilidad política sostenida
en la existencia de dos partidos principales y
su alternancia pacífica en el poder.
• Sin embargo, la propia naturaleza de los
partidos dinásticos llevaba a su debilidad: no
eran partidos de masas.
• Las muertes de Cánovas, Sagasta y
Canalejas llevó a la desestabilización de los
partidos dinásticos.
• Por otro lado, se rompió la práctica del
turnismo, en tanto que en 1912 Maura
proclamó la imposibilidad de mantener dicha
práctica con un Partido Liberal que
consideraba demasiado inclinado hacia la
izquierda. Comenzaba así el verdadero
enfrentamiento entre los partidos dinásticos.
Alfonso XIII.
4. La descomposición del sistema político
de la Restauración.
• Todos estos problemas
llevaron a la inestabilidad
política: entre 1918 y 1923
el país conoció diez
cambios de gobierno,
ninguno de los cuales llegó
a tener más de un año en
el poder. Todo ello llevó a
imposibilidad de realizar
reformas, de contener la
inflación y al recurso de
medidas de excepción,
suspensión de las
garantías constitucionales
y a la clausura del
Parlamento.
Alfonso XIII
celebrando
las bodas de
plata con su
familia.
Atentado
contra el
rey Alfonso
XIII.
5. El conflicto colonial de Marruecos.
• A partir de 1900, una vez
perdido completamente el
imperio ultramarino, España
consolidará su penetración en el
norte de África.
• A partir de la Conferencia de
Algeciras (1906) y del posterior
Tratado hispanofrancés (1912),
se establecía un protectorado
fracoespañol en la zona de
Marruecos.
• España participaba así del
reparto de África, obteniendo el
protectorado sobre el territorio
de El Rif, una zona montañosa
de Marruecos, que debía
organizar y pacificar.
Fotografía de la Conferencia de Algeciras.
Viñeta satírica sobre la Conferencia de Algeciras.
6. El conflicto colonial de Marruecos.
• Los motivos de la intervención
española en la zona fueron:
– Recuperar el prestigio nacional
tras las pérdidas de 1898.
– Mantener el equilibrio estratégico
en el estrecho de Gibraltar.
– Garantizar el orden de la región
del Rif (entre Ceuta y Melilla), que
era un escenario de conflictos
constantes entre las tropas
españolas y las tribus locales.
– Los posibles beneficios
económicos (minas, inversiones
en ferrocarriles…)
– Además, el ejército estaba
especialmente empeñado en la
cuestión de Marruecos como
fórmula para restaurar su
prestigio.
Alfonso XIII con los principales generales
del ejército español.
7. El conflicto colonial de Marruecos.
• La presencia española en esta
área fue contestada por los
continuos ataques de los
rifeños, organizados en cabilas.
En 1909, los rifeños lograron
derrotar a las tropas españolas
en el Barranco del Lobo,
ocasionando numerosas bajas.
• A partir de ese momento, se
decidió aumentar el número de
soldados en el Rif con
reservistas, muchos de ellos
casados y con hijos, y se
preparó la salida de varios
regimientos desde Barcelona, lo
que provocó un importante
movimiento de protesta popular.
Fotografía
s de la
Semana
Trágica de
Barcelona.
8. El conflicto colonial de Marruecos.
• Protectorado: territorio colonial sobre el que se concede su gobierno y control
(protección) a una potencia, aunque se respeten algunas autoridades locales.
• Cabila: nombre con el que se conoce a las tribus de beduinos o beréberes.
9.
10. La Semana Trágica de Barcelona.
• La movilización de tropas para resolver
la cuestión marroquí provocó el
descontento de las clases populares
debido a los reclutamientos forzosos
de tropas para una guerra que sólo
interesaba a dos grupos sociales
minoritarios:
– Un sector del ejército, los llamados
“africanistas”, que veían en ella la
oportunidad de recuperar el
prestigio perdido tras el 98, de
ascender en el escalafón y de
lograr mayor protagonismo político.
– Los capitalistas interesados en la
explotación de las minas de hierro
del Rif y en las inversiones en la
región.
– Además, los que tenían dinero se
libraban de la incorporación a filas
mediante el pago de una cuota o el
envío de un sustituto.
Imágenes de la Semana Trágica de
Barcelona.
11. La Semana Trágica de Barcelona.
• La movilización contra la guerra se
inició en el puerto de Barcelona el 18
de julio de 1909, durante el
embarque de tropas hacia
Marruecos. El día 24 se constituyó
un comité de huelga, con la
participación de republicanos
lerrouxistas, socialistas y
anarquistas, que hizo un llamamiento
a la huelga general para el día 26.
• La huelga contra la guerra de
Marruecos acabó derivando en un
estallido espontáneo de todas las
tensiones sociales, multiplicándose
los incidentes en la calle:
enfrentamientos con las fuerzas del
orden, levantamiento de barricadas,
ataques a centros religiosos… Imágenes de la Semana Trágica de Barcelona.
12. La Semana Trágica de Barcelona.
• Así, la huelga, acabó
convirtiéndose en una rebelión
popular, a lo que las autoridades
respondieron declarando el
Estado de guerra y enviando
refuerzos para reprimir las
manifestaciones y provocando
un gran número de muertos y
heridos, lo que radicalizó la
insurrección en las calles.
• Finalmente, la falta de dirección
y de coordinación políticas y la
acción de las fuerzas de orden
público llevaron a que el
movimiento de contestación
social fuera controlado el día 2
de agostoLa Carga, obra pictórica de Ramón Casas.
13. La Semana Trágica de Barcelona.
• Una vez terminada la Semana
Trágica (con el resultado de 100
muertos), se inició una durísima
represión por parte del gobierno de
Maura.
• Se celebraron 216 consejos de
guerra y se dictaron 17 condenas a
muerte, de las cuales sólo se
ejecutaron cinco; entre ellas la de
Francisco Ferrer y Guardia,
pedagogo anarquista y fundador de
la Escuela Moderna (institución
pedagógica laica e innovadora) y
que no había participado en la
revuelta; sin embargo, dado el signo
anticlerical del levantamiento, a juicio
de las clases altas, debía ejercerse
un “castigo ejemplar” contra quienes
ponían en duda su dominio.
Imágenes
de la
Semana
Trágica de
Barcelona.
14. La Semana Trágica de Barcelona.
• La represión de la
Semana Trágica
levantó una oleada de
protestas por sus
excesos y
arbitrariedades y el
gobierno de Maura tuvo
que enfrentarse a duras
críticas de liberales y
republicanos, que
exigieron su dimisión.
• La oposición nacional e
internacional a Maura
(con el eslogan: ¡Maura
no!) consiguió
finalmente que Alfonso
XIII disolviera las
Cortes y traspasara el
gobierno a los liberales.
15. El impacto de la Gran Guerra.
• En 1914 estallaba en Europa la
Primera Guerra Mundial.
• En España, el gobierno de
Eduardo Dato mantuvo la
neutralidad española en el
conflicto (algo en lo que
estuvieron de acuerdo todas
las fuerzas políticas).
• No obstante, la opinión pública
española empezó a dividirse
entre “aliadófilos” y
“germanófilos”.
• La guerra generalizada en
Europa llevó a España a
exportar productos industriales
y agrarios, de los que los
países combatientes tenían
gran necesidad y por los que
se pagaban altos precios.
Imágenes
de la
Primera
Guerra
Mundial.
16. El impacto de la Gran Guerra.
• Comenzó así un crecimiento
espectacular de la demanda y los
industriales hicieron grandes
necios.
• Si bien el aumento de las
exportaciones supuso una gran
oportunidad de crecimiento para la
economía española, provocará
también una gran inflación.
• Efectivamente, los precios de los
productos en el mercado interior
experimentaron alzas desorbitadas
que no fueron acompañadas por
subidas salariales. Incluso se llegó
a la escasez de ciertos productos
(algunos de ellos de primera
necesidad).
Arriba y página siguiente. Imágenes de la Primera Guerra Mundial.
17. El impacto de la Gran Guerra.
• Mientras aumentaban los beneficios empresariales, la carestía de vida
se convirtió en un problema grave para las clases obreras (que perdían
capacidad adquisitiva mientras se encarecían productos como el pan, el
arroz, el bacalao o los combustibles).
• Por lo tanto, comenzó un empeoramiento de las condiciones de vida de
los trabajadores en un momento de enriquecimiento espectacular de los
empresarios, lo que llevará a un aumento de la conflictividad social.
• En este contexto, las organizaciones obreras encabezarán una protesta
cada vez mayor que acabará en el conflicto huelguístico de 1917.
19. El impacto de la Revolución rusa.
• Otro hecho agudizó aún más la
situación de confrontación social: el
triunfo de la revolución bolchevique
en Rusia; hecho que asustó a la
burguesía y abrió nuevas
esperanzas a muchos obreros y
campesinos, que consideraron esta
revolución como un modelo.
• En este contexto la presión del
movimiento obrero se hizo aún más
fuerte, al tiempo que muchos
patronos se pasaron a la política del
enfrentamiento.
• La presión del movimiento obrero
llevará finalmente a que el gobierno
adopte algunas medidas de carácter
social, como la jornada de ocho
horas o la creación del Ministerio de
Trabajo.
Lenin durante las jornadas de la revolución
bolchevique de 1917 en Moscú.
20. La crisis de 1917.
• En todo este
contexto nacional e
internacional tendrá
lugar la crisis
general de 1917;
protesta
generalizada de
carácter
antigubernamental
que reflejaba
descontentos muy
diversos: desde los
oficiales del ejército
hasta la clase
obrera, pasando por
los partidos políticos
situados al margen
del turno dinástico.
Obreros fabriles
en el siglo XIX
en España.
21. La huelga general de 1917.
La huelga general de 1917.
• En 1916 ya se había producido un
importante movimiento huelguístico
y, en marzo de 1917, las centrales
sindicales CNT y UGT acordaron
firmar un manifiesto conjunto en el
que se reclamaban al gobierno
medidas para contener los precios
bajo la amenaza de convocar una
huelga general.
• Esta huelga se convocaría contra el
régimen político y el deterioro del
nivel de vida de los trabajadores.
• La tensión estalló en agosto de 1917
con la huelga de ferroviarios de
Valencia, momento en el que la UGT
y la CNT, con apoyo del PSOE,
convocaron una huelga general.
Imagen superior y página siguiente:
imágenes de la represión del movimiento
huelguístico de 1917.
22.
23. La huelga general de 1917.
• La protesta adquirió un carácter político, ya que las fuerzas obreras
convocantes reclamaban también el fin de la monarquía, la formación
de un gobierno provisional que convocara Cortes Constituyentes y el
paso a un sistema republicano.
• Si bien el seguimiento de la huelga fue total en Madrid, Barcelona, País
Vasco y Asturias, donde se llegó a paralizar la vida ciudadana, apenas
fue secundada por el campesinado.
Movimiento huelguístico de 1917.
25. La huelga general de 1917.
• La respuesta del gobierno fue básicamente represiva: se declaró la
Ley Marcial y se envió al ejército contra los huelguistas, deteniendo al
comité de huelga y sometiéndolos a un consejo de guerra.
Pintura sobre la
huelga de 1917 en
Asturias.
• A finales de
agosto, la
huelga había
sido reprimida,
con un
resultado de
más de 70
muertos, unos
200 heridos y
más de 2.000
detenidos.
26.
27. La huelga general de 1917.
• La huelga general fracasó y no
consiguió contar con el apoyo
de amplios sectores, pero tuvo
unas enormes consecuencias:
– Debilitó aún más al régimen,
que demostró su brutalidad y
radicalizó a la oposición.
– El régimen de la
Restauración entró en su
crisis definitiva.
– La derrota provocó que la
UGT diera un vuelco hacia
posiciones más moderadas,
sin intentos revolucionarios a
corto plazo.
28. Los años difíciles (1918-1923).
• Crisis económica:
• El fin de la Primera Guerra
Mundial supuso la
progresiva recuperación de
la producción industrial de
los países beligerantes y los
industriales catalanes y
vascos perdieron los
mercados en los que habían
vendido sus productos
durante la guerra.
• La gran caída de las
exportaciones llevó al cierre
de fábricas, al aumento del
paro, al descenso de los
salarios y, como no podía
ser de otro modo, al
malestar social y a la
conflictividad obrera.
• Entre 1918 y 1923, cuatro elementos
llevarán a una crisis contínua:
– Crisis económica.
– Conflictividad social.
– Radicalización de los
nacionalismos.
– Los problemas de la guerra de
Marruecos.
Fabrica del
siglo XIX.
29. Los años difíciles (1918-1923).
Conflictividad obrera y pistolerismo.
• El aumento del
paro, la subida
de los precios y
la bajada de
los salarios que
acompañaron
al final de la
Primera Guerra
Mundial,
llevaron otra
vez a la
movilización
obrera y a un
enorme
crecimiento del
sindicalismo.
• El movimiento huelguístico afectó a un gran número
de regiones industriales, pero fue en Cataluña y,
especialmente en Barcelona donde tuvo mayor
incidencia gracias a la acción de la CNT.
Recorte de
prensa sobre
la huelga de
la
Canadiense
en
Barcelona
en 1919.
30. Los años difíciles (1918-1923).
Conflictividad obrera y pistolerismo.
• Ante ello, la patronal reaccionó
con el lock-out (cierre temporal de
la empresa), la represión de los
sindicatos y se recurrió al llamado
“terrorismo blanco” (contratación
de pistoleros y bandas armadas
para asesinar a dirigentes
obreros). Este será el camino
seguido por un importante grupo
de empresarios, que formaron la
“Federación Patronal”, que
fundará el llamado Sindicato Libre,
el cual, con el objetivo de
enfrentarse y acabar con la CNT
empleará acciones violentas.
• En este contexto, aumentarán las
acciones violentas de grupos
vinculados a la CNT, que
practicarán un “activismo violento”.
Salvador Seguí, máximo dirigente de la CNT
fue asesinado el 10 de marzo de 1923 en la
calle de la Cadena de Barcelona. Dibujo de la
portada de la revista “La Campana de Gràcia”.
31. Los años difíciles (1918-1923).
Conflictividad obrera y pistolerismo.
• En este contexto de huelgas y
violencia, las autoridades civiles
y militares llevarán a cabo una
política de dura represión contra
los sindicalistas, poniendo en
práctica la Ley de Fugas (según
la cual, un policía podía disparar
contra los detenidos en caso de
intento de fuga); mientras,
practicaba la tolerancia de los
pistoleros de la patronal.
• Por todo ello se conoce a la
época comprendida entre 1917 y
1923 como el “pistolerismo”,
debido a que tuvieron lugar más
de 800 atentados en los cuales
murieron 226 personas.
Cartel que denunciaba la actuación gubernamental
contra el sindicalismo (1921), incluía la siguiente
leyenda: “Gobiernos de extrema derecha y
militares depravados arman a bandas de asesinos
a sueldo para privar a los obreros de sus más
destacados defensores”.
32.
33. Los años difíciles (1918-1923).
El desastre de Annual.
• El protectorado español en Marruecos
presentaba una serie de inconvenientes:
– Era un territorio muy montañoso, con
escasas y difíciles vías de
comunicación.
– La riqueza económica de la zona se
limitaba a algunas minas de hierro
localizadas en las montañas del Rif.
– Las tribus rifeñas eran muy belicosas.
– Difícil control de la bahía de
Alhucemas, punto estratégico que unía
las comandancias militares de Ceuta y
Melilla.
– A ello se unía la impopularidad de la
guerra y la división dentro del propio
ejército entre el sector “africanista”, que
se podía beneficiar de los ascensos por
méritos de guerra, y el sector “juntista”,
que rechazaba este sistema de
promoción. Soldados españoles en la Guerra de
Marruecos.
35. Los años difíciles (1918-1923).
El desastre de Annual.
• Al comenzar la
década de 1920, en la
zona oriental del
protectorado de
Marruecos, las tribus
rifeñas hostigaban al
ejército español de
forma continua.
• En 1921 se nombraba
comandante de Melilla
al general Silvestre
(relacionado con el rey
Alfonso XIII), que
cometió un enrome
error militar cuyo
resultado tendrá
enormes
consecuencias. Cartel satírico sobre la derrota de Annual en 1921.
36. Los años difíciles (1918-1923).
El desastre de Annual.
• En julio de 1921, el general Silvestre comenzará una ofensiva hacia el
interior para controlar la estratégica zona de Alhucemas; pero su
imprudencia y sus errores tácticos (en contraste con la eficaz actuación
del líder rifeño Abd el-Krim, llevarán a la derrota de Annual; un
auténtico desastre militar, con más de 13.000 bajas en las tropas
españolas y la pérdida de gran parte del territorio ocupado.
A la derecha, el general Silvestre ocupando
la posición de Sidi Dris poco antes de su
gran derrota en Annual. A la izquierda el
líder rifeño Abd el-Krim.
38. Los años difíciles (1918-1923).
El desastre de Annual.
• El desastre de Annual tuvo un gran
efecto sobre la opinión pública y
llevó a la caída del gobierno.
• La figura del propio rey fue
cuestionada como responsable del
desastre, debido a su conocimiento
y aprobación de los hechos.
• Finalmente, se formó una comisión
para aclarar las acusaciones contra
el rey, los políticos y el ejército. Sin
embargo, el informe de la
investigación, encomendado al
general Picasso, no llegará a las
Cortes, ya que pocos días antes de
su presentación el general Miguel
Primo de Rivera daría un golpe de
Estado que iniciará una nueva
etapa política: la Dictadura de
Primo de Rivera. Dibujo satírico sobre el Expediente Picasso,
publicado en la revista Blanco y Negro, 1922.
39.
40. La dictadura de Primo de Rivera.
El golpe de Estado.
• El 13 de septiembre de 1923, el capitán
general de Cataluña, Miguel Primo de
Rivera, mandó ocupar los servicios
telefónicos de Barcelona y leyó un
comunicado, dando un golpe de
Estado.
• A continuación, declaró el Estado de
guerra y se dirigió al monarca para
pedirle que el poder pasase a manos
de los militares.
• Alfonso XIII (a pesar de la petición del
gobierno de destituir a los sublevados),
acabará dando su apoyo a Primo de
Rivera, mandándole formar gobierno.
• Así, Miguel Primo de Rivera se
convertirá en dictador militar único,
aunque contaría con la asistencia de un
directorio militar integrado por
generales.
Retrato de Miguel Primo de
Rivera.
41. La dictadura de Primo de Rivera.
El golpe de Estado.
• El dictador justificó el golpe a través
de un discurso de pretensiones
“regeneracionistas” e incluso
moralistas, que se centraba en la
crítica de la “vieja política” y
presentaba un claro componente
populista.
• Sin embargo, según opinan la mayoría
de los historiadores, lo que pretendía
Primo de Rivera no era poner fin a un
régimen caduco, sino más bien evitar
que el régimen político acabara por
democratizarse, limitando el poder de
las clases tradicionalmente
dominantes y de la monarquía.
Retrato de Alfonso XIII.
42. La dictadura de Primo de Rivera.
El golpe de Estado.
• La dictadura fue, por tanto, una
solución inconstitucional para frenar la
posible reforma del sistema, que podía
resultar amenazadora para ciertos
sectores e intereses sociales.
• El régimen de Primo de Rivera, contará
con el soporte del rey Alfonso XIII, pero
también de una parte importante del
ejército, de la burguesía y de sectores
conservadores del país (terratenientes,
iglesia, etc.)
• El general Primo de Rivera presentaba,
además, su gobierno como una
solución transitoria que duraría sólo el
tiempo necesario para restablecer el
orden social en España y la situación
militar en Marruecos.
Fotografía de Miguel Primo de Rivera.
43. La dictadura de Primo de Rivera.
Causas del golpe.
• Causas del régimen de Primo
de Rivera:
• Inestabilidad y bloqueo del
sistema político parlamentario.
• Desprestigio parlamentario,
debido al continuo fraude
electoral.
• El miedo de las clases
acomodadas a una revolución
social ante el auge de la
conflictividad obrera y
campesina.
• El auge del republicanismo y
de los nacionalismos
periféricos.
• El fracaso de la política
española en Marruecos.
• El descontento del ejército,
especialmente tras el desastre
de Annual, partidario del
restablecimiento del orden,
cada vez más alterado por la
creciente conflictividad social.
• El deseo de una parte del
ejército y quizá del propio rey
Alfonso XIII, de evitar que las
Cortes exigieran
responsabilidades por los
hechos de la guerra de
Marruecos.
Abd el-Krim,
cadí de la
tribu de los
Biniurriaguel.
44. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• Los objetivos
principales de la
dictadura de Primo
serán:
– Resolver el
problema de
Marruecos.
– El
restablecimiento
del orden
público.
– El progreso
económico del
país.
– El freno de los
nacionalismos.Miguel Primo de Rivera, en el centro, encontró como principales apoyos
de su régimen, además de al ejército, al clero y a la burguesía industrial.
45. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• Una vez en el poder, Primo
de Rivera decretó el Estado
de guerra durante casi dos
años como fórmula para
restablecer el orden
público. Se trato, sin
embargo, de una auténtica
política de represión y de
disminución de las
libertades públicas
(prohibición de reuniones y
asociaciones, censura de la
prensa…) La contundente
represión contra la CNT
(cuyos locales y órganos
de prensa fueron
clausurados), la obligó, de
hecho, a pasar a la
clandestinidad.
Alfonso XIII
despachando
con Primo de
Rivera.
Primo de
Rivera con su
directorio
militar.
46. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• El asunto de la guerra de
Marruecos era uno de los
mayores problemas a los
que se enfrentaba la
dictadura, debido a la
impopularidad de la guerra
(especialmente tras el
desastre de Annual) y a la
división del ejército entre
africanistas y abandonistas.
• Aunque Primo era, en
principio, partidario de
abandonar Marruecos, los
oficiales africanistas
acabarán por convencerle
de continuar la guerra.
Fotografías del desembarco de
Alhucemas.
47. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
Ocupación española del protectorado de Marruecos tras el desembarco francoespañol en la bahía
de Alhucemas.
48. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• Sin embargo, el fin de la
guerra se deberá sobre
todo al error táctico del
líder rifeño Abd-el-Krim,
que atacó a los franceses
en 1925, lo que llevó a una
acción conjunta hispano-
francesa: el ejército
desembarcó en Alhucemas
y, tras varias derrotas, Abd-
el-Krim tuvo que rendirse,
finalizando la guerra.
• Así, en 1927 el ejército
español dio por finalizada
la ocupación efectiva de
todo el territorio de
Marruecos.
Arriba: pintura
que representa
el desembarco
en Alhucemas.
Abajo:
fotografía del
desembarco de
Alhucemas.
49. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• Por otro lado, la dictadura de Primo de
Rivera se mostrará intransigente con
los movimientos nacionalistas:
suprimió la Mancomunidad de
Cataluña en 1925, prohibió el uso del
catalán, el baile de la sardana… Todo
ello desacreditó a la Lliga regionalista
y a su líder Cambó, que habían
apoyado al dictador en el momento
del golpe de Estado.
• En cuanto al PNV, sus líderes fueron
encarcelados o se exiliaron, se
clausuraron sus locales y se
suspendieron algunos periódicos.
A la derecha: Miguel Primo de
Rivera junto al rey Alfonso XIII.
50. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• La dictadura se benefició de la buena
coyuntura económica internacional a
nivel mundial (“los felices años
veinte”), que le permitió poner en
marcha un programa de fomento de la
industria y mejora de las
infraestructuras.
• Aumentó la intervención estatal y se
nacionalizaron importantes sectores
de la economía.
• La dictadura optó por una política
proteccionista, imponiendo aranceles
que convirtieron a la economía
española en una de las más cerradas
y protegidas de Europa.
• Aumentaron la producción agrícola e
industrial, aunque la productividad se
mantuvo muy baja. El charlestón se convirtió en el baile de moda
en EEUU durante los “felices años veinte”.
51. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• Al tiempo, se destinaron
grandes cantidades de los
presupuestos del Estado a
subvencionar industrias con
problemas económicos,
especialmente compañías
ferroviarias y navieras.
• También se concedieron
grandes monopolios, como el de
la telefonía, a la Compañía
Telefónica Nacional de España
(concedida a la International
Telephone and Telegraph) o la
exclusividad en la importación,
refinado, distribución y venta de
petróleo a la compañía
CAMPSA.
Arriba:
camión-
cisterna de
CAMPSA de
principios de
siglo.
Abajo:
camión-
cisterna
actual.
52. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio militar (1923-1925).
• Se puso en marcha un ambicioso
programa de obras públicas que
pretendía mejorar 7.000 kilómetros
de carreteras (aunque sólo se
arreglaron unos 3.000) y se inició
un plan de construcción de
embalses para producir energía
hidroeléctrica y aumentar la
superficie de regadío (aunque sólo
se realizó, y de modo parcial, en la
cuenca del Ebro).
• Toda esta política económica llevó
al gobierno de la dictadura a
acumular una enorme deuda
pública.
• Además, no se realizó ninguna
reforma agraria, continuando el
“hambre de tierras” entre los
jornaleros agrícolas.
Tranvía en Mallorca durante los años 20.
El transporte urbano comenzaba a
desarrollarse en algunas ciudades
españolas con el uso del tranvía.
53. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio civil (1925-1930).
• Una vez solucionados los
grandes problemas que podían
justificar la situación excepcional
de la dictadura ante la opinión
pública, Primo de Rivera tuvo la
oportunidad de retirarse y
permitir el retorno a la
normalidad constitucional, pero
no lo hizo, sino que, a finales de
1925 tratará de renovar su
régimen dictatorial mediante la
sustitución del directorio militar
por un nuevo directorio civil de
carácter más técnico.
• Esta medida evidenciaba la
intención del dictador de
mantenerse en el poder,
abandonando la idea de una
dictadura transitoria
Miguel Primo de Rivera y los principales
miembros del directorio militar durante la
dictadura.
54. La dictadura de Primo de Rivera.
El directorio civil (1925-1930).
• En su intento de perpetuarse en el poder,
Primo de Rivera tratará de transformar la
dictadura en un régimen a su medida:
• En primer lugar, en 1927 convocó una
Asamblea Nacional Consultiva de carácter
corporativo, en sustitución de las Cortes,
cuyos miembros serían elegidos por
designación (sin sufragio).
• Creó un partido único, la Unión Patriótica
que pretendía promover la adhesión al
régimen para proporcionar apoyo social a la
dictadura.
• Sin embargo, estos intentos de construir un
régimen dictatorial permanente apenas
obtuvieron apoyo político y social.
• Es más, la dictadura debió afrontar numeras
críticas (como las de los intelectuales
Ortega y Gasset, Azorín, Valle Inclán y
Unamuno) y manifestaciones de oposición.
Arriba.
Retrato de
Unamuno,
por Joaquín
Torres.
Abajo:
Retrato de
Ortega y
Gasset, por
Zuloaga.
55. La caída del dictador.
• Mientras, los republicanos y los
sindicatos se rehicieron y la CNT reinició
los movimientos huelguísticos.
• Ante esta situación de aislamiento
político, el dictador decidió hacer una
consulta a sus capitanes generales para
saber si contaba son cu apoyo. El ejército
le negó también el apoyo que necesitaba
y, finalmente, él 28 de enero de 1930,
Miguel Primo de Rivera presentaba al rey
su dimisión.
• Alfonso XIII, tras la caída del dictador,
encomendó el gobierno al general
Berenguer, con la tarea de reconstruir la
anterior normalidad constitucional (reabrir
las Cortes, convocar elecciones, poner
en marcha los partidos políticos…)
El general Berenguer (en el centro) fue el elegido por
Alfonso XIII para intentar “resucitar” el cadáver político
de la Restauración.
56. La “Dictablanda” y el fin de la
Monarquía.
• Sin embargo, la monarquía había
perdido el apoyo de la mayor parte
de los españoles, entre otras cosas
por haber apoyado a la dictadura
de Primo de Rivera; además, los
antiguos partidos dinásticos no
tenían ninguna base popular.
• Al margen del sistema, los partidos
de la oposición establecieron el
Pacto de San Sebastián (17 de
agosto de 1930), integrado por
republicanos y autonomistas
gallegos y catalanes, y después
también socialistas y anarquistas.
El objetivo era instaurar la
República, incluso con un
alzamiento militar si era necesario.
Manuel
Azaña, líder
de Acción
Republicana.
Francesc Maciá,
líder de Esquerra
Republicana de
Cataluña
57. La “Dictablanda” y el fin de la
Monarquía.
• Finalmente, la caída de la
monarquía vendrá provocada por
los resultados de las elecciones
municipales del 12 de abril de 1931,
en las que los republicanos
obtuvieron una gran victoria,
especialmente en las ciudades
(donde el caciquismo y el
pucherazo era más difícil)
Alegoría de la República.
58. La “Dictablanda” y el fin de la
Monarquía.
• En un clima de euforia y
sin violencia, muchos
ayuntamientos, al conocer
el resultado de las
elecciones, proclamaron
la República.
• El rey Alfonso XIII, ante la
falta de apoyos optó por
abandonar España y partir
hacia el exilio (aunque sin
renunciar a sus derechos
a la Corona).
• El 14 de abril de 1931 se
proclamaba la Segunda
República y se formaba
un gobierno provisional. Proclamación de la II República en las calles de Madrid.