El documento discute la importancia de tener valores fundamentales que guíen nuestras acciones. Sugiere que los valores solo producen valor cuando orientan nuestras acciones prácticas. Epicteto aconsejó "prescribirnos una cierta manera de vivir o una ley que observemos inviolablemente", lo que implica adquirir un nuevo carácter a través de la reflexión. Siguiendo valores fundamentales como la perseverancia o la honestidad, podemos modelar nuestro carácter para ser coherentes en todo momento y lugar.