La escuela unitaria fue fundada en una comunidad rural para brindar educación elemental a niños que no podían viajar a la ciudad a estudiar. El terreno para la escuela fue donado y su construcción fue apoyada por donaciones del gobierno municipal, aunque solo se pudo completar un aula y los baños permanecen inacabados. La participación de padres y vecinos fue clave para terminar rápidamente la construcción del aula.