2. ¿QUÉ ES LA ATENCIÓN TEMPRANA?
“Es el conjunto de intervenciones, dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a sus familias y al entorno, que,
desde una perspectiva interdisciplinar sanitaria, educativa y social, tiene por objetivo dar respuesta, lo más pronto
posible y con carácter integral, a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños y niñas con
trastornos en su desarrollo o con riesgo de padecerlos”.
Tras el nacimiento, la atención y el esfuerzo de los profesionales sanitarios es mucho mayor, especialmente en
aquellos casos en los que la vida de los niños y niñas pueda estar comprometida. Más tarde, son los y las
profesionales del ámbito educativo y el ámbito social los que toman el relevo en cuanto a la intensidad de la
intervención, lo que naturalmente no quiere decir que no sigan
siendo atendidas sus necesidades de salud.
3. OBJETIVOS DE LA ATENCIÓN
TEMPRANA
1. Reducir los efectos de una deficiencia o déficit sobre el conjunto global del desarrollo del niño.
2. Optimizar, en la medida de lo posible, el curso del desarrollo del niño.
3. Introducir los mecanismos necesarios de compensación, de eliminación de barreras y adaptación a
necesidades específicas.
4. Evitar o reducir la aparición de efectos o déficits secundarios o asociados producidos por un trastorno o
situación de alto riesgo.
5. Atender y cubrir las necesidades y demandas de la familia y el entorno en el que vive el niño.
6. Considerar al niño como sujeto activo de la intervención.
4. NIVELES DE INTERVENCIÓN EN
ATENCIÓN TEMPRANA
Del modelo biopsicosocial de la Atención Temprana se deriva la necesidad de establecer relaciones
con los programas y servicios que actúan en el contexto del niño y de su familia. Los centros y servicios de
Atención Temprana deberán realizar sus actuaciones de manera que se procure la coincidencia con
aquellos esfuerzos sociales que desde otras instancias de la administración y la comunidad favorecen la
salud, la educación y el bienestar social. De manera esquemática podemos diferenciar tres niveles en los
que tendría que basarse esta colaboración.
5. PRVENCION PRIMARIA
La prevención primaria de los trastornos en el desarrollo infantil tiene por objetivo evitar las
condiciones que pueden llevar a la aparición de deficiencias o trastornos en el desarrollo infantil.
Los servicios competentes en estas acciones son, prioritariamente, los de Salud, Servicios Sociales y
Educación. Otros departamentos como Trabajo y Medio Ambiente tienen también importantes
responsabilidades en este ámbito.
SERVICIOS DE SALUD
LOS SERVICIOS SOCIALES
SON COMPETENCIA DE LOS SERVICIOS EDUCATIVOS
LOS CENTROS DE DESARROLLO INFANTIL Y ATENCIÓN TEMPRANA
6. PREVENCION SECUNDARIA
La prevención secundaria en Atención Temprana tiene por objetivo la detección y el diagnóstico
precoz de los trastornos en el desarrollo y de situaciones de riesgo.
DETECCIÓN
. Es necesario detectar los trastornos del desarrollo infantil en el momento en que aparecen los primeros
signos indicadores de los mismos, si es posible antes de que los diferentes síndromes se estructuren de forma
completa y estable. La detección de signos de alerta, que constituyen posibles indicadores de trastornos en el
desarrollo infantil, debe estar presente en el trabajo cotidiano de todos aquellos que trabajan con poblaciones
infantiles.
7. DIAGNÓSTICO
El diagnóstico de una alteración en el desarrollo consiste en su puesta en evidencia de una alteración
en el desarrollo así como el conocimiento de sus supuestas causas, permitiéndonos la comprensión del proceso y
el inicio de una adecuada intervención terapéutica.
El diagnóstico en Atención Temprana debe contemplar los ámbitos biológicos, psicológicos, sociales y
educativos, siendo precisa la colaboración de profesionales de diferentes disciplinas y ámbitos: medicina,
psicología, pedagogía y ciencias sociales.
8. PREVENCIÓN TERCIARIA
La prevención terciaria en Atención Temprana agrupa todas las actividades dirigidas hacia el niño y su
entorno con el objetivo de mejorar las condiciones de su desarrollo. Se dirige al niño, a su familia y a su
entorno. Con ella se deben atenuar o superar los trastornos o disfunciones en el desarrollo, prevenir
trastornos secundarios y modificar los factores de riesgo en el entorno inmediato del niño.
La intervención debe ser planificada con carácter global y de forma interdisciplinar, considerando las
capacidades y dificultades del niño en los distintos ámbitos del desarrollo, su historia y proceso evolutivo,
así como las posibilidades y necesidades de los demás miembros de la familia y los recursos de que se
dispone; y el conocimiento y actuación sobre el entorno social.
9. una condición necesaria para alcanzar una buena calidad de vida en los años
posteriores, y para que las personas con autismo logren un desarrollo pleno de
sus capacidades. Fue considerado durante años como un trastorno con muy
mal pronóstico y con escasas Posibilidades de mejora.
Sin embargo, sabemos hoy día que, de producirse una detección temprana y
una intervención en los primeros meses y años de vida, existe margen para
enormes mejorías en la evolución de estos niños y niñas
Las recomendaciones generales para la intervención en autismo indican que es
necesario actuar pronto e intensivamente sobre el niño o niña, pero que no
tiene sentido hacerlo sin contar con su familia, y que debemos modificar los
entornos para optimizar su aprendizaje e inclusión.
ATENCION TEMPRANA Y TEA
10. SOBRE QUÉ QUEREMOS INTERVENIR
Los rasgos nucleares del autismo y las áreas del desarrollo
Los objetivos y metas de cualquier intervención son el punto de partida de
la misma. En el caso del autismo, parecerían obvios: se trata de abordar
aquellos aspectos en los que los niños y niñas tengan más dificultades,
para optimizar su calidad de vida presente y futura. Está claro, por tanto,
que es necesario trabajar con las dimensiones que están más claramente
relacionadas con el diagnóstico del autismo.
Por tanto, esperamos que cualquier intervención en autismo actúe para
limitar el impacto y reducir dificultades como las siguientes
11. Cualquier intervención en autismo actúa para limitar el
impacto y reducir dificultades como las siguientes:
Dificultades en la reciprocidad socioemocional, es decir, problemas para
compartir intereses o emociones, o responder a ellas, o dificultades a la hora
de interactuar socialmente con los demás.
Problemas en la comunicación no-verbal, como contacto ocular o uso de los
gestos anómalo o problemas en su comprensión.
Limitaciones en el mantenimiento de las amistades o falta de interés en otros
niños y niñas.
Conductas, habla o uso de objetos repetitivos o estereotipados.
Falta de flexibilidad y adhesión a pautas de conductas concretas, rutinas o
rituales, tanto verbales como no verbales.
Intereses altamente restringidos y anómalos en su intensidad.
Hipo o híper-reactividad ante determinados estímulos o intereses muy
centrados en algunos aspectos del entorno.
12. Sin embargo, esto es solo la mitad de la historia. Un niño con autismo es,
ante todo, un niño. Por tanto, un currículo de intervención incluirá no solo
lo que necesita por su diagnóstico, sino, probablemente con tanta o más
intensidad, lo que forma parte de las áreas de desarrollo de cualquier
menor de su edad.
Tradicionalmente, esto va a suponer optimizar la evolución en el ámbito
del lenguaje y la comunicación, el desarrollo cognitivo, el desarrollo de la
psicomotricidad, y la conducta adaptativa.
13. METODOLOGIAS DE INTERVENCION
A continuación, revisaremos de forma somera algunas de las distintas
metodologías de intervención aplicables en Atención Temprana
14. METODO ABA
Estos programas se basan en la idea de que los comportamientos son
aprendidos y pueden ser manipulados a través de los estímulos
ambientales que los anteceden o siguen. Utilizan procedimientos típicos
de la modificación de conducta o el análisis conductual aplicado, como
son el encadenamiento, la verbal o física, el desvanecimiento, el
moldeamiento, o el reforzamiento positivo o negativo, junto con el
modelado conductual
ABA VIDEO 1
ABA VIDEO 2
15. SAAC
Todos utilizamos CAA cuando hacemos una expresión facial o un gesto, o
cuando empleamos símbolos o dibujos, o escribimos. Las personas con
problemas severos de habla o lenguaje emplean la CAA para suplementar el
habla existente o para reemplazar el habla que no es funcional. El CAA no ha
de ser un sustituto del habla, sobre todo en aquellas personas que ya la han
adquirido, ha de emplearse para mejorar la comunicación.
Los CAA sin ayuda no cuentan con soportes de apoyo externos, por ejemplo,
gestos, lenguaje corporal, lengua de signos, etc.
Los sistemas CAA con ayuda son ayudas materiales o aparatos electrónicos
que pueden o no ofrecer salida de voz. Los aparatos que producen salida de
voz pueden ofrecer cartas, palabras y frases o una variedad de símbolos que
permiten al usuario construir mensajes, estos mensajes pueden ser hablados
electrónicamente y/o impresos en un dispositivo visual o papel.
16. Aquellos menores con nivel más severo de TEA y mayores
necesidades de apoyo
Aquellos menores con nivel más severo de TEA y mayores necesidades de
apoyo, podrían beneficiarse más de un programa comprehensivo
conductual o un programa educativo tipo Denver.
Método ABA VS modelo Denver
Método ABA
17. Para los y las menores con un nivel menos severo de TEA: Aquellos que
tengan una menor afectación en el desarrollo intelectual o cuyas
necesidades se focalicen más en el área socio-adaptativa, con los datos
actuales se sugiere un programa evolutivo o el TEACCH al inicio de la
intervención. Si debido a sus necesidades, se pretende centrarse en
objetivos de funcionamiento intelectual, se aconseja un programa
conductual y posteriormente pasar a un programa evolutivo o TEACCH
para desarrollar habilidades adaptativas.
18. Para personas que tengan un nivel de funcionamiento intelectual
más alto, pero padezcan
problemas de ansiedad social
Para personas que tengan un nivel de funcionamiento intelectual más alto,
pero padezcan problemas de ansiedad social, se puede considerar
complementar la intervención con terapias sensoriales o motrices de corta
duración.
19. Intervenciones no recomendadas
Quelación.
Terapia Lupron.
Dieta libre de gluten y caseína.
Terapia con Células Madre.
Inyecciones de secretina.
Terapia de agentes antifúngicos.
Suplementos vitamínicos.
Leche cruda de camello.
20. Intervenciones no recomendadas
Terapia de Marihuana.
Terapia con parches de nicotina.
Terapia con Hipoclorito de sodio (lejía).
Estimulación magnética transcraneana
21. Recomendaciones para el trabajo con
la familia
Construir una relación estrecha y respetuosa con las familias teniendo en cuenta su
diversidad cultural, lingüística y socioeconómica.
Proporcionar a las familias información actualizada y comprensiva de un modo que
puedan comprenderla y tomar las decisiones correspondientes.
Tener en cuenta las preocupaciones, prioridades y circunstancias de las familias.
trabajar con las familias para desarrollar los planes de intervención, y desarrollar esta de
forma conjunta.
Apoyar el funcionamiento de la familia, su confianza y capacidades, así como fortalecer
las relaciones con sus hijos e hijas.
Proporcionar a las familias oportunidades para desarrollar sus conocimientos y
habilidades como padres y madres.
Ayudarles a emplear los recursos formales e informales existentes.
Ayudar a las familias a conocer sus derechos y ponerlas en contacto con organizaciones
de autoayuda y apoyo.