Las últimas colonias españolas en América fueron Cuba, Puerto Rico y Filipinas. La independencia de las colonias hispanoamericanas se produjo entre 1810 y 1825, comenzando con las declaraciones de autonomía de Buenos Aires y otras ciudades. Para 1898, los únicos territorios españoles que quedaban eran estos tres, pero ese año Estados Unidos provocó la guerra con España para ganar prestigio internacional y crear su propio imperio, derrotando a la flota española y obteniendo el control sobre Cuba y Puerto Rico.