La sexualidad es un conjunto de fenómenos emocionales y conductuales que marcan el desarrollo humano. Incluye el impulso sexual y la relación con el cuerpo, más allá de la reproducción. En la adolescencia, la sexualidad debe ejercerse con responsabilidad y respeto por los derechos de los demás, esperando a tener madurez física, emocional y mental para tomar decisiones informadas. Una sexualidad saludable requiere respeto mutuo entre hombres y mujeres.