La Web 1.0 permitía a los usuarios consumir información de forma pasiva a través de sitios web unidireccionales. La Web 2.0 introdujo sitios web colaborativos donde los usuarios podían crear y compartir contenido de forma activa. La Web 3.0, también conocida como la Web Semántica, permitirá a las máquinas procesar y comprender los datos de la web para facilitar la interacción entre usuarios, equipos y sitios web a través de lenguaje natural e inteligencia artificial.
1. La Web 1.0. La Web 2.0. La Web 3.0 (Semántica).
“Sistema basado en hipertexto, que
permite clasificar información de
diversos tipos conocidos como la
gran información de diversos tipos,
conocido como la gran telaraña
mundial”
Funciona por hipertexto y gráficos e
incluye efectos multimedios
Es considerado como el acceso más
sencillo y comprensible al universo
de la información disponible en
Internet.
Enlaza páginas o documentos
localizados en la red sin importar su
ubicación física o geográfica.
Protocolos de internet: http, html.
Sitios direccionales y no
colaborativos.
Los usuarios son lectores
consumidores.
Interacción mínima reducida a
formularios de contacto, inscripción
boletines, etc.
Segunda generación de Web
basada en comunidades de
usuario.
Se pasa de una web informativa,
creada por expertos a una web
social, donde cualquiera puede
participar fácilmente.
Aparecen aplicaciones Web muy
potentes y sencillas de manejar
enfocadas al usuario final.
Basa su desarrollo en CMS
(Sistemas de Gestión de
Contenidos).
permite la creación y
administración de contenidos
principalmente en páginas web.
“El usuario es el centro”
Protagonista que crea y comparte.
Es una técnica de desarrollo web
que combina varias tecnologías
Básicamente son un editor de
texto online que permite que sus
contenidos sean escritos de forma
colaborativa a través de un
navegador, utilizando una
notación sencilla para dar
formato, crear enlaces, etc.
La noción de web se emplea para
nombrar a una red informática y, en
especial, a Internet. La idea de web
3.0 alude a una especie de
extensión o de formato particular de
la red tradicional.
Los usuarios y los equipos, en este
marco, pueden interactuar con la red
mediante un lenguaje natural,
interpretado por el software. De esta
manera, acceder a la información
resulta más sencillo. Dicho de otro
modo, todos los datos alojados en la
web 3.0 deberían ser “entendidos”
por las máquinas, que podrían
procesarlos con rapidez.
La web 3.0, en definitiva, está
relacionada con la inteligencia
artificial. Los sitios web incluso
tendrían la capacidad de conectarse
entre sí de acuerdo a los intereses
del usuario.