Un milagro se define como un acto especial de Dios que suspende o altera temporalmente las leyes de la naturaleza. Los milagros tienen el propósito de confirmar un mensaje o mensajero de Dios y glorificar a Dios. Existen diferencias clave entre los milagros realizados por Dios y los falsos milagros atribuidos a Satanás, como que los de Dios son totalmente auténticos y con fines buenos, mientras que los de Satanás son imitaciones con propósitos engañosos.