El documento contrasta los átomos, que ocupan un espacio físico tangible y pesado, con los bits, que permiten la transferencia digital más rápida, económica y fácil de información como música y datos. Si bien la digitalización facilita y simplifica la transferencia de información, también puede aislarnos de las interacciones en persona y dejar atrás a aquellos con pocos recursos tecnológicos.