España tiene una gran diversidad de paisajes debido a su ubicación geográfica en el extremo suroeste de Europa y su costa con el mar Mediterráneo y el océano Atlántico. La península Ibérica está montañosa con la cordillera de los Pirineos al norte y el sistema Ibérico y la cordillera Cantábrica en el interior, mientras que las costas están dominadas por llanuras y mesetas con alturas medias de 600 a 1000 metros sobre el nivel del mar.