Las estrellas de mar se encuentran en todos los océanos del mundo, desde la zona intermareal hasta profundidades de 6,000 metros. Carecen de cerebro pero poseen un complejo sistema nervioso debajo de la piel. Se alimentan de presas lentas como moluscos y gasterópodos mediante la eyección de enzimas digestivas. Pueden reproducirse tanto sexual como asexualmente, aunque la mayoría son hermafroditas.