2. LA VOCACIÓN LLAMA…
Aunque mis padres se han desenvuelto
en el ámbito educativo, no son
profesores del estado. En mi familia hay
varios profesores, por parte de mi padre,
así que lo considero como un gen dentro
de mí. Desde pequeña jugaba con mis
primos más pequeños a la escuelita. Por
lo que lo considero una señal, además
de tener empatía con los más pequeños,
aunque sean desconocidos. Por causas
económicas entré a una Universidad
Pedagógica Nacional. Mi alma mater,
aprendí mucho de mis maestros, los
mejores. Así como también a lo largo de
los semestres fui descubriendo mi
vocación, el porque me agrada trabajar
con pequeños.
3. Durante la universidad…
Durante la estancia en la universidad aprendí
lo básico sobre el desarrollo del infante,
desde que es un neonato. En las aulas con la
teoría , después en la practica. Debo decir
que en la Universidad Pedagógica nacional,
estudie la carrera de Intervención Educativa,
en la cual nos preparamos para intervenir en
las situaciones que se presentan en el medio
formal de la educación así como el no
formal. Y lo que ello implica en la educación.
Durante la formación universitaria asistí a
diferentes ponencias y cursos que fueron
impartidos, tanto en el plantel como fuera de
él. Y estos fueron muy enriquecedores, en ese
momento no lo sabía pero tiempo después
en aula esos conocimientos me serían de
gran utilidad.
4. Después de la universidad…
La preparación sigue siendo continua,
y más aún cuando me encuentro
trabajando frente a grupo, encontré
trabajo saliendo de la carrera. Era una
novata, pues el realizar prácticas
profesionales no se compara en nada
cuando te encuentras frente a un
grupo de 30 preescolares de 5 años.
Inicié desde abajo; como asistente de
tercer grado, y aunque sabía muchas
cosas teóricas nada se comparaba
con el estar ahí día a día.
5. Aun así seguí preparándome, he
tomado diferentes cursos, en mi
área de Educación inicial.
Especialmente para trabajar con
la estimulación e intervención
temprana. El año pasado asistí a
dos cursos, uno en la ciudad de
Veracruz con el Dr. Jorge Roberto
Ortega Ávila, un Neurocirujano de
la ciudad de Querétaro México el
cual trabaja con el método
Katona, y sirve para hacer
intervenciones tempranas con
bebés que presentan o pudieran
presentar daños cerebrales en el
momento de su nacimiento.
6. En agosto del año pasado tomé
otro curso en el DF, siguiendo con
mi línea de aprendizaje sobre el
desarrollo de los bebés. En este
caso es el de Masajes para bebés
que ofrece IMETYD, con aval de la
UNAM. Fue un curso de una
semana en la cual aprendimos
cuando dar masajes a los bebés y
cuando no. Empezando primero
por conocer el cuerpo humano,
las partes que lo componen.
Después por el ambiente que
debe de haber mientras se dan
los masajes relajantes. Así como el
masajista en qué condiciones se
debe de encontrar para dar un
buen masaje a los bebés.
7. En el mes de mayo conocí Coursera me
interesó así que decidí unirme y entrar a
los diversos cursos que ofrecen de
manera gratuita. Esa fue una de mis
primeras experiencias al entrar a cursos
en línea y la verdad que es me dejó un
muy buen sabor de boca. Pues debo
decir que este tipo de cursos se
adaptan fácilmente a nuestras
apretadas agendas de trabajo. Al
primer curso al que asistí fue el de
Pensamiento científico, impartido por la
UNAM y el Dr. Carlos Gershenson y aquí
al final de este escrito mostraré mi
trabajo final de ese curso, el cual fue
realizar una propuesta en la que se
muestre como utilizar el pensamiento
científico en vida cotidiana o en el
ámbito profesional, y al ser yo miss de
preescolar pensé en elaborar una
propuesta para mis alumnos, mis
pequeños grandes científicos.