Este documento proporciona nociones básicas sobre la transexualidad y promueve un uso del lenguaje que no sea dañino. Explica que la identidad sexual reside en el cerebro y no en los genitales, por lo que las personas transexuales no tienen un cuerpo equivocado. Además, desmonta mitos comunes como que las personas transexuales están atrapadas en un cuerpo equivocado o que quieren cambiar de sexo, y promueve el uso de términos como "persona transexual" en lugar de simplemente "transexual".