Los científicos descubrieron que hace aproximadamente 6 millones de años, el mar Mediterráneo se secó completamente debido al cierre del estrecho de Gibraltar por el desplazamiento de las placas tectónicas africana y euroasiática, impidiendo que el agua del Atlántico entrara. El mar se fue secando por evaporación hasta que hace unos 7 millones de años, fenómenos geológicos erosionaron el estrecho y permitieron que el agua del Atlántico lo volviera a llenar en solo dos años.