Este documento resume tres principios para vivir una vida de fe basados en Rut 1:16-17. Primero, debemos admirar a nuestros líderes y dejar que nos influyan positivamente. Segundo, debemos tener un corazón fiel y leal a Dios y a nuestro pueblo. Tercero, debemos tener determinación para no rendirnos en la fe.
Principios para Vivir una Vida en Fe: Admirar a tu Líder, Ser Fiel y Determinado
1. Principios para Vivir una Vida en Fe
“Respondió Rut: No me ruegues que te deje, y me aparte de ti; porque a
dondequiera que tú fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo
será mi pueblo, y tu Dios mi Dios” (Rut 1:16). Con éste versículo comienza ésta
predica el pastor Cesar Castellanos, en donde se enfocará en hablar sobre, tres
principios fundamentales que se pueden tomar de las palabras de Rut.
En primer lugar nos muestra que Rut llegó a tener una admiración por su
líder. Esto quiere decir que a quien uno admire, es sobre quien una va a ser
influenciado. Eso quiere decir, que si tu líder es una persona que utiliza drogas o
es alcohólica, lamentablemente ese será tu destino. Es importante que los
discípulos aprendan a admirar a su líder. Como por ejemplo el hijo al padre, el
esposo a la esposa, la esposa al esposo, etc. Depende de lo que sea uno y si es
admirado por el otro, lo más seguro que el que es influenciado dirá, “yo quiero
ser así”.
Esto es muy importante en los discípulos de los líderes de las iglesias, ya
que si uno de ellos quita los ojos de su líder, viene el enemigo y te desvía. Si abre
los oídos al enemigo, él te desviará. Esto quiere decir que si oyes al enemigo te
sacará del propósito, te contaminará la mente. El líder y su discípulo se conocen
en medio de la adversidad, “No me ruegues que te deje, y me aparte de ti”. La fe
es importante en ese momento, la fe en el líder es muy importante, pero
también que los discípulos se sientan seguros de la fe del líder.
Se ejemplo en todo cuando seas líder. El cristiano debe ser cristiano las 24
horas del día, los 7 días de la semana, las 4 semanas del mes, los 12 meses del año
y todos los años de su vida.
En segundo lugar, aquí se demuestra que Rut tenía un corazón fiel, “a
dondequiera que tú fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo
será mi pueblo, y tu Dios mi Dios”. Que extraordinario lo que dice ésta mujer,
donde quiera que tú vayas, iré yo y tú Dios será mi Dios. La fidelidad no puede
2. quitarse o ponerse como un vestido, siempre debe andar con la persona. Todo
tiene que ver con la fidelidad. Esto debe ser del esposo a la esposa, de la esposa
al esposo, del líder a sus discípulos, de los discípulos al líder, del hombre a Dios.
Pero también es importante la fidelidad en la fe.
Entonces, debido a esto, es importante pedirle a Dios que no permita que
defraude la fe de la esposa, el esposo, la del padre, la del hijo, el familiar, el líder,
a la iglesia, y la más importante la del Padre Celestial, entre otras personas.
Veamos que Rut estaba dispuesta a morir donde muriera Noemí, aun no siendo
Judía “Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada; así me haga Jehová, y
aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos” (Rut 1:17)
Y en tercer y último lugar, uno debe decir “yo debo ser de determinación”,
eso es lo que vemos lo que Rut dice en los dos versículos expuestos, el 16 y 17. La
persona debe ser de determinación. No acepte que nadie se lleve a su conyugue.
No hay que darse por vencido. Esto implica que hay que admirar al líder, hay que
admirar a la esposa, a la familia, etc., y nunca se permita hablar palabras
negativas. Siempre alabarla con palabras bonitas. Amén.
Osmán Montero (Agosto 09 de 2009).