El documento describe las diferentes identidades y roles de un asesor juvenil. Debe desarrollar una identidad psicológica, espiritual, pedagógica y teológico-pastoral. Sus roles incluyen escuchar, acompañar y encarnar el amor de Dios a los jóvenes. También debe capacitarse continuamente para comprender mejor a los jóvenes y utilizar los medios adecuados. El asesor debe acompañar a los jóvenes individualmente y en grupos para apoyar su crecimiento integral.