1. Muchas personas cuentan la historia de la gringa del cerro
chilco y a la vez nos dicen que pasaron por situaciones en
que ella se les apareció y trató de encantarles. Bueno hoy
les hablaré un poco más acerca de esta historia que pone
“los pelos de punta” a más de uno.
Desde hace muchos años se cuenta que una rubia es el
embeleso de los choferes. Los que han tenido la dicha de
encontrarse con ella viven momentos de felicidad, sobre
todo cuando el afortunado, cree que ha logrado conquistar
el corazón de la rubia.
Dicen que la rubia es una bellísima mujer joven de
cabellos de oro, ojos azules, y de tez suave, labios rojos,
de cuerpo esbelto y lozano como una diosa.
La particularidad de esta mujer es que casi siempre se les
aparece solo a los choferes, por el lugar llamado “El cerro
chilco” y pide que la conduzcan a Pacasmayo, a veces más
prefiere ir al cementerio. En algunos casos graves, por los
que pasaron, han sido que para recuperarse de ese suceso
tuvieron que ser conducidos al hospital
Esta bellísima aparición ha logrado cautivar más de un
corazón: el poeta Jacinto Mendoza en su poemario “Temario y
Misterios de Cupisnique” le dedicó estas líneas:
“Hermosa rubia de tez nácar,
Mejillas rosas, carmín sus labios
Que de entre abiertos cáliz de lirios
Hermosas perlas se ven brillar.
Ojos celestes, igual que el cielo,
Son dos luceros que en esas noches
De intermitentes luces fugaces,
Hacen más lindo su hermoso pelo

2. Leve sudario, cubre sus formas
Excelsas curvas de gran belleza
Transluce hermosa, clara belleza
Con su cadencia resalta más”
Finalmente agreguemos una nota trágica que ocurrió en los
ochenta, El 29 y 31 de marzo de 1982, el diario local
“ultimas noticias” trae la noticia trágica y que perennizó
en una nota que a la letra dice así:
Sucedió: el chofer Luis del Campo torres, de regreso a
Trujillo, sabiendo sobre la “gringa”, no quiso regresar solo,
se detuvo en san pedro para buscar pasajeros pero no
consiguió ninguno. Se fue solo. Al llegar al cerro chilco
intempestivamente aparece una mujer; él, asustado, creyendo
que era la rubia, aceleró su carro atropellando a la mujer.
Después de haberle pasado el carro por encima pensó ¿y si no
era la rubia…?se volvió a san pedro para dar cuenta a la
policía. Cuando llegaron al lugar del incidente, allí estaba
la mujer aún con vida, y no era rubia.
La llevaron a la clínica donde llegó cadáver
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