El aprendizaje colaborativo se remonta a la cooperación entre los primeros humanos, la cual fue clave para su evolución. El aprendizaje colaborativo organiza la influencia mutua entre los miembros de un equipo a través de un proceso gradual de compromiso con el aprendizaje de los demás. Se adquiere a través de métodos de trabajo grupal caracterizados por la interacción y contribución de todos en la construcción del conocimiento.